El pasado 12 de setiembre la guerrilla del PKK atacó un puesto militar, 8 combatientes kurdos pierden la vida, es entonces que bajo las órdenes de los oficiales, 40 soldados turcos posan ante los cadáveres maltratados de sus enemigos afirmando la superioridad de la raza turca y la inhumanidad feroz del régimen criminal turco.
Recordemos que el régimen turco ha estado entrenando a miles de terroristas internacionales para enviarlos la vecina Siria a cometer sus atroces crímenes.
La Turquía de Erdogan –en su papel de lacayo del imperialismo-, de los militares fascistas y de las bases de la OTAN es un foco de desestabilización para Oriente Medio, para Rusia y Ucrania, para Siria y la Nación árabe, para Armenia, para las minorías nacionales y para Persia; y para el mundo…