España. Alberto Rivera, fue llevado al seminario católico a la edad de siete años para comenzar las enseñanzas orientadas por la iglesia católica.
Desde que entró a ese lugar, sintió dentro de sí, cosas horribles y espeluznantes, cosas que años después lo harían escribir su testimonio.
Dice el ex cura que cuando fue llevado a ese lugar, los recibió un tal padre Abraham, quién lo llevó por todas las instalaciones.
Dice el ex cura que cuando fue llevado a ese lugar, los recibió un tal padre Abraham, quién lo llevó por todas las instalaciones.
A los 2 años de haberse instalado en ese lugar, su madre cayó gravemente enferma, para ser honestos, agonizaba.
El joven Alberto, aterrorizado con la idea de ver a su madre en cama moribunda, se rehusó a visitarla, y prefirió quedarse en hostil lugar, sin embargo, fue obligado por el rector de ese lugar a visitarla y así fue.
El joven Alberto, aterrorizado con la idea de ver a su madre en cama moribunda, se rehusó a visitarla, y prefirió quedarse en hostil lugar, sin embargo, fue obligado por el rector de ese lugar a visitarla y así fue.
Por lo demás los años transcurrieron y el joven creció hasta que una noche, a punto de quedarse dormido, aconteció que sucedió en el seminario tarde en la noche.
Ya Alberto, se había ido a dormir cuando alguien se metió en su cama y comenzó a besarlo, y sucedió que era el rector del seminario, el joven decidió parar parte del abuso de este y le ensañó un puñetazo, en cuanto otro cura fue ver lo que pasó, lo hizo arrodillarse y pedir perdón por lo sucedido, cuestionando que cuál había su falta, el cura le dijo:”
Ya Alberto, se había ido a dormir cuando alguien se metió en su cama y comenzó a besarlo, y sucedió que era el rector del seminario, el joven decidió parar parte del abuso de este y le ensañó un puñetazo, en cuanto otro cura fue ver lo que pasó, lo hizo arrodillarse y pedir perdón por lo sucedido, cuestionando que cuál había su falta, el cura le dijo:”
Tu pecado, Alberto, fue que él te ofreció su amor y éste era el “amor de Dios”, y tú lo rechazaste”
Así también se dio cuenta de que la iglesia católica prohíbe a sus seminaristas leer la biblia, no tener relaciones, sin embargo, los gobiernos italianos y español, han encontrado miles de cadáveres de feto, que se produjeron de las relaciones cometidas por monjas y sacerdotes.
Se cuestionaba: ¿si hay tantos abortos, como es posible que la iglesia esté en contra del mismo?
Así también se dio cuenta de que la iglesia católica prohíbe a sus seminaristas leer la biblia, no tener relaciones, sin embargo, los gobiernos italianos y español, han encontrado miles de cadáveres de feto, que se produjeron de las relaciones cometidas por monjas y sacerdotes.
Se cuestionaba: ¿si hay tantos abortos, como es posible que la iglesia esté en contra del mismo?
Alberto también se dio cuenta de que el homosexualismo y lesbianismo eran comunes en los seminarios, conventos y abadías en donde hasta los cardenales más cercanos al Papa tenían su pareja.
Todo este tipo de hechos alternaron la concepción del Dr. Alberto Rivera sobre lo que creía. Asimismo, como el caso de una clase en la que contendió y dijo al profesor que Pedro no era la roca en la que Dios edificaría su iglesia, pues el tradujo correctamente y Pedro significa piedra, y Simón, arena.
Todo este tipo de hechos alternaron la concepción del Dr. Alberto Rivera sobre lo que creía. Asimismo, como el caso de una clase en la que contendió y dijo al profesor que Pedro no era la roca en la que Dios edificaría su iglesia, pues el tradujo correctamente y Pedro significa piedra, y Simón, arena.
La respuesta del sacerdote fue:
¡Hablas como un hereje, quedas fuera de la orden!
Posteriormente, un estudiante le entregó un nuevo testamento a hurtadillas, pues, ellos no podían leer la biblia como mencioné anteriormente, y miró la carta del apóstol Pablo a Timoteo, capítulo 3:2, 3, 4, 5, que decía:
Posteriormente, un estudiante le entregó un nuevo testamento a hurtadillas, pues, ellos no podían leer la biblia como mencioné anteriormente, y miró la carta del apóstol Pablo a Timoteo, capítulo 3:2, 3, 4, 5, que decía:
Entonces es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospitalario, apto para enseñar;
3 no dado al vino; no violento, sino amable; no contencioso ni amante del dinero.
4 Que gobierne bien su casa y tenga a sus hijos en sujeción con toda dignidad.
5 Porque si alguien no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la Congregación de Dios?”
Y después encontró este verso:
“El lo llevó a Jesús, y al verlo Jesús le dijo:
—Tú eres Simón hijo de Jonás.
Tú serás llamado Cefas —que significa piedra—. Juan 1:42.
Surgen estas incógnitas:
Si Pablo dice que honroso es el matrimonio,
¿por qué la iglesia católica prohíbe casarse?
¿Y por qué llaman a Pedro la roca de edificación, si Jesús lo llamó Cefas: piedra?
Este es el caso Alberto Rivera, una persona que abrió los ojos ante una realidad que se mantuvo oculta desde hace mucho tiempo, y que al día de hoy, lamentablemente, la gente no quiere ver en realidad lo que sucede y sucedió, lo que ha pasado.
Este es el caso Alberto Rivera, una persona que abrió los ojos ante una realidad que se mantuvo oculta desde hace mucho tiempo, y que al día de hoy, lamentablemente, la gente no quiere ver en realidad lo que sucede y sucedió, lo que ha pasado.
La hipocresía que se ve entre corredores y pasadizos, escondiendo y encubriendo a los más grandes canallas que con falsa piedad, lanzan hechizos a una mayoría que desventuradamente se resbala en este maleficio, con su doctrina pérfida, sus engaños y sus burlas ante lo que Dios más amó, ama y quiso, su iglesia, a la que con gran sacrificio de sangre el líder de estos rufianes tiene por el piso.
Editorial para Protege A Tus Hijos
costarica@protegeatushijos.org
Editorial para Protege A Tus Hijos
costarica@protegeatushijos.org