La Organización de Naciones Unidas (ONU) acusó este lunes a Israel de violar el derecho a la vivienda de los palestinos con la construcción ilegal de asentamientos en territorio ocupado de Palestina y con la aplicación de políticas urbanas, que han promovido a un desarrollo territorial que "excluye, discrimina y desplaza a las minorías" de las comunidades en los territorios ocupados.
La relatora especial de la ONU sobre el derecho a la vivienda digna, Raquel Rolink, rechazó a través de un comunicado "la reciente privatización, desregulación y comercialización de los bienes públicos en el país", que "han resultado en políticas urbanas y de vivienda que hacen cada vez más difícil para las familias con bajos ingresos el acceso a un alojamiento digno".
"Las minorías palestinas y los palestinos que viven bajo la ocupación militar son los que se ven más afectados por esta situación, que supone una amenaza contra su derecho a la vivienda", denunció la experta de la ONU.
El número de permisos de edificación concedidos "es desproporcionado respecto a las necesidades de alojamiento, lo que obliga a muchos palestinos a construir sin obtener un permiso", aseguró.
Rolink agregó que como consecuencia "muchas viviendas palestinas son consideradas ilegales y los alojados son amenazados con su demolición".
Según Israel, "sólo se destruyen las infraestructuras que han sido construidas sin los permisos necesarios".
Asimismo, la relatora de Naciones Unidas instó al Gobierno de Benjamin Netanyahu a parar el bloqueo y garantizar las necesidades mínimas de la población de Gaza. A su juicio, actualmente el derecho a la vivienda digna "se niega claramente en los territorios ocupados".
"Las autoridades israelíes tenían un récord impresionante para proveer alojamiento adecuado para inmigrantes y refugiados judíos, pero hoy esas políticas han fallado para responder a las necesidades de las minorías y los que están en desventaja social", enfatizó.
Ante esta situación, Rolink reclamó una "revisión urgente" de este tipo de leyes.
La relatora realizó una visita de dos semanas a Israel y los territorios palestinos ocupados, donde recibió repetidas quejas sobre la falta de vivienda, las amenazas de demolición y el número desproporcionado de destrucción de viviendas que han afectado a las comunidades palestinas.
En enero pasado, las Naciones Unidas instó a Israel a detener inmediatamente la destrucción de viviendas palestinas en el territorio ocupado de Cisjordania, tras constatar un aumento dramático de las demoliciones durante el pasado año.
Las fuerzas israelíes destruyeron 622 hogares palestinos en Cisjordania en 2011, forzando el desplazamiento de cerca de mil 100 personas, más de la mitad eran niños, de acuerdo con un informe de la oficina de coordinación de asuntos humanitarios de la ONU.
Ante esta situación, el Gobierno palestino se ha negado a regresar a las negociaciones directas con Israel, congeladas desde septiembre de 2010, debido a los asentamientos israelíes en los territorios ocupados.
teleSUR-AFP-EFE/kg - FC
La relatora especial de la ONU sobre el derecho a la vivienda digna, Raquel Rolink, rechazó a través de un comunicado "la reciente privatización, desregulación y comercialización de los bienes públicos en el país", que "han resultado en políticas urbanas y de vivienda que hacen cada vez más difícil para las familias con bajos ingresos el acceso a un alojamiento digno".
"Las minorías palestinas y los palestinos que viven bajo la ocupación militar son los que se ven más afectados por esta situación, que supone una amenaza contra su derecho a la vivienda", denunció la experta de la ONU.
El número de permisos de edificación concedidos "es desproporcionado respecto a las necesidades de alojamiento, lo que obliga a muchos palestinos a construir sin obtener un permiso", aseguró.
Rolink agregó que como consecuencia "muchas viviendas palestinas son consideradas ilegales y los alojados son amenazados con su demolición".
Según Israel, "sólo se destruyen las infraestructuras que han sido construidas sin los permisos necesarios".
Asimismo, la relatora de Naciones Unidas instó al Gobierno de Benjamin Netanyahu a parar el bloqueo y garantizar las necesidades mínimas de la población de Gaza. A su juicio, actualmente el derecho a la vivienda digna "se niega claramente en los territorios ocupados".
"Las autoridades israelíes tenían un récord impresionante para proveer alojamiento adecuado para inmigrantes y refugiados judíos, pero hoy esas políticas han fallado para responder a las necesidades de las minorías y los que están en desventaja social", enfatizó.
Ante esta situación, Rolink reclamó una "revisión urgente" de este tipo de leyes.
La relatora realizó una visita de dos semanas a Israel y los territorios palestinos ocupados, donde recibió repetidas quejas sobre la falta de vivienda, las amenazas de demolición y el número desproporcionado de destrucción de viviendas que han afectado a las comunidades palestinas.
En enero pasado, las Naciones Unidas instó a Israel a detener inmediatamente la destrucción de viviendas palestinas en el territorio ocupado de Cisjordania, tras constatar un aumento dramático de las demoliciones durante el pasado año.
Las fuerzas israelíes destruyeron 622 hogares palestinos en Cisjordania en 2011, forzando el desplazamiento de cerca de mil 100 personas, más de la mitad eran niños, de acuerdo con un informe de la oficina de coordinación de asuntos humanitarios de la ONU.
Ante esta situación, el Gobierno palestino se ha negado a regresar a las negociaciones directas con Israel, congeladas desde septiembre de 2010, debido a los asentamientos israelíes en los territorios ocupados.
teleSUR-AFP-EFE/kg - FC