De acuerdo con un estudio elaborado por
científicos argentinos, el Wi-Fi de una laptop desaparece hasta una
cuarta parte de los espermatozoides masculinos y daña un 9% de su
estructura genética.
Aunque
pasar un buen rato con la laptop entre las piernas pueda ser un hábito
más o menos extendido, pudiera no ser uno de los más benéficos para la
salud reproductiva, al menos en el caso de los hombres.
De acuerdo con un estudio publicado en
la revista especializada Fertility and Sterility, los investigadores
argentinos Conrado Avendaño, Ariela Mata y otros, el dispositivo Wi-Fi
del que se sirve una computadora portátil para conectarse a Internet
afecta notablemente a las células reproductivas masculinas.
Avendaño y sus colegas colocaron unas
cuantas gotas de semen debajo de una laptop conectada a Internet por
medio de Wi-Fi y después comenzaron a navegar.
Algunas horas después, el
semen se había esfumado: una cuarta parte de las células había
desaparecido, lo cual contrasta con apenas el 14% de otra muestra tenida
en condiciones de temperatura similar pero lejos de una computadora.
Además, un 9% del ADN de la semilla mostró algún tipo de daño, tres veces más que el de la muestra de control.
Según Avendaño la causa de esta muerte y
malformación masiva de células masculinas podría deberse a la radiación
electromagnética propia de las conexiones inalámbricas. Y abundó:
Nuestros datos sugieren que el uso de una
computadora portátil conectada inalámbricamente a Internet y colocada
cerca de los órganos reproductivos masculinos puede reducir la calidad
del esperma.
Queda por definir, sin embargo, si esta
nociva radiación proviene de los dispositivos Wi-Fi o de la computadora
en sí, además de comprobar sus efectos más allá del esperma, sea en la
fertilización o la procreación.
Entretanto, si te preocupa tu salud o la
de tu progenie, quizá sea buena idea erradicar ese hábito de dejar que
tu laptop se apoye en tus partes blandas.