En una base de operaciones secretas en la ciudad puerto paquistaní de Karachi, miembros de una división de elite de la corporación privada Blackwater están en el centro de un programa secreto que planea asesinatos selectivos de sospechosos de pertenecer al Talibán y Al Qaeda, dentro y fuera de Pakistán, bajo las órdenes del Comando de Operaciones Especiales Conjuntas de Estados Unidos (JSOC, por su sigla en inglés).
Los operativos de Blackwater también recolectan inteligencia y colaboran directamente en la campaña militar secreta estadounidense de bombardeo en Pakistán con aviones sin piloto, llamados “drones” (abejorro depredador), en un programa que funciona paralelamente a los mejor documentados ataques de la CIA con sus propios “abejones”, según una fuente bien situada dentro del aparato de inteligencia militar de Estados Unidos.
El capitán John Kirby, portavoz oficial del almirante Michael Mullen, cabeza del Staff Conjunto de Jefes, dijo a The Nation: “Nosotros no discutimos operaciones que están desarrollándose de una u otra manera, sin importar su naturaleza”. Simultáneamente, un funcionario de Defensa negó específicamente que Blackwater propinara golpes de “abejón” en Pakistán o realizara trabajos de inteligencia encomendados por el JSOC. “No tenemos ningún contrato para hacer ese trabajo para nosotros.
No contratamos esa clase de trabajo externo, periódico”, dijo el funcionario. “No han habido, ni existen ahora, contratos entre el JSOC y esa organización para esos tipos de servicios”. El Pentágono ha repetido monótonamente: “En Pakistán no hay operaciones de ataque militar que estén siendo conducidas por Estados Unidos”.
El fundador de Blackwater, Erik Prince, contradijo esta declaración en una entrevista, con la revista Vanity Fair, al informar que su corporación guerrera trabaja con las fuerzas especiales de Estados Unidos en la identificación de blancos y planificación de misiones, citando una operación en Siria. La revista también publicó una foto de una base de Blackwater cerca de la frontera de Afganistán-Pakistán.
La fuente de inteligencia militar del periodista Jeremy Scahill (The Nation) dijo que el programa, que anteriormente no era conocido, es distinto al esquema de asesinatos de la CIA, cuya cancelación anunció el director de la agencia, León Panetta, en junio de 2009. “Esta es una operación paralela a la CIA”, dijo la fuente. “Son dos bestias distintas”.
El programa puso a Blackwater en el epicentro de una operación militar de Estados Unidos dentro de las fronteras de una nación contra la que Estados Unidos no se ha declarado en guerra, cuyo conocimiento público podría conducir más lejos las ya tensas relaciones entre Estados Unidos y Pakistán.
En 2006, Estados Unidos y Pakistán negociaron un trato que autorizaría al JSOC a ingresar a Pakistán para cazar a Osama Bin Laden, pero se entiende que Pakistán se negó a otorgar el permiso. Oficialmente, se supone que Estados Unidos no tiene ninguna operación militar activa en ese país.
Blackwater, que también usa los nombres “Servicios Xe” y “Centro de Formación de Estados Unidos”, niega que la corporación actúe en Pakistán. “Servicios Xe tiene en Pakistán solamente un empleado, ejecutante de una construcción para el gobierno de Estados Unidos”, dijo a The Nation el portavoz de Blackwater Mark Corallo, añadiendo que la compañía no tiene “ninguna otra clase de operación en Pakistán”.
Un ex ejecutivo "senior" de Blackwater confirmó que la compañía trabaja en Pakistán para la CIA y el JSOC en la búsqueda de fuentes de inteligencia militar. Dijo que Blackwater también trabaja para el gobierno paquistaní en un subcontrato con una empresa de seguridad de Islamabad que provee operativos estadounidenses de infantería para operaciones de “contención del terrorismo” con las fuerzas paquistaníes, incluyendo ataques a viviendas y enclaves fronterizos, en la provincia limítrofe del noroeste y en otras partes de Pakistán.
Este arreglo permite que el gobierno paquistaní utilice a ex miembros de Operaciones Especiales de Estados Unidos que ahora trabajan para Blackwater, mientras oficialmente se niega la presencia militar de Estados Unidos en el país. También confirmó que Blackwater tiene una instalación en Karachi y mantiene personal desplegado en otras partes de Pakistán.
Este arreglo permite que el gobierno paquistaní utilice a ex miembros de Operaciones Especiales de Estados Unidos que ahora trabajan para Blackwater, mientras oficialmente se niega la presencia militar de Estados Unidos en el país. También confirmó que Blackwater tiene una instalación en Karachi y mantiene personal desplegado en otras partes de Pakistán.
El programa secreto en Pakistán data de por lo menos 2007. El jefe actual del JSOC es el vicealmirante William McRaven, quien asumió el control después del general Stanley McChrystal, quien dirigió el JSOC desde 2003 a 2008, antes de ser nombrado comandante en jefe de Estados Unidos en Afganistán.
La presencia de Blackwater en Pakistán “no es realmente visible y eso es porque nadie ha tropezado con ella”, dijo la fuente militar de Scahill. Las operaciones de Blackwater en Pakistán -añadió la fuente- no se hacen a través de contratos del departamento de Estado o de contratos públicos identificados del ministerio de Defensa. “Blackwater opera vía JSOC bajo una no-oferta [contrato] clasificada y aprobada sobre una base de equilibrio”.
El primer contrato conocido Blackwater/CIA para operaciones en Afganistán fue concedido en 2002 y cubría trabajos a lo largo de la frontera Afganistán-Pakistán.
De acuerdo con la fuente de Scahill, Blackwater fue mercadeada con eficacia como una compañía cuyos operativos tienen capacidad de “conducir misiones mortales de acción directa y ahora, por un precio, ustedes pueden tener su propia célula de planificación. El JSOC ahora deja comer”. Los contratos Pakistán/JSOC de Blackwater son secretos y, por lo tanto, están blindados ante cualquier negligencia pública, dijo.
Además de planear -para el JSOC y la CIA- ataques de “drones” y operaciones contra sospechosos de integrar fuerzas de Al Qaeda y el Talibán en Pakistán, el equipo de Blackwater en Karachi además colabora en misiones contra el movimiento islámico del interior de Uzbekistán, también planeadas para el JSOC.
Desde que comenzó el gobierno del presidente Barack Obama, Estados Unidos amplió sus incursiones de bombardeo con “drones” en Pakistán. Obama primero ordenó –el 23 de enero de 2009–ataques de “abejones depredadores” contra blancos al norte y al sur de Waziristan y desde entonces, los bombardeos se mantienen constantes.
La administración de Obama ahora ha superado a la era Bush en el número de ataques en Pakistán y ha hecho frente a feroces críticas por las muertes de civiles expresadas por legisladores paquistaníes y de algunos de Estados Unidos.
La administración de Obama ahora ha superado a la era Bush en el número de ataques en Pakistán y ha hecho frente a feroces críticas por las muertes de civiles expresadas por legisladores paquistaníes y de algunos de Estados Unidos.
La fuente de inteligencia militar también confirmó que Blackwater continúa trabajando para la CIA en su programa de bombardeos con drones en Pakistán, según informó previamente el New York Times, pero añadió que Blackwater también está trabajando en los bombardeos con abejón del JSOC. “Blackwater lleva adelante el programa de ambos, de la CIA y el JSOC”, dijo la fuente. Cuando matan a civiles, “la gente exclama ‘Oh, es la locura de la CIA, que otra vez caga desenfrenada’. “Bien, por lo menos el 50% del tiempo son ataques del JSOC. que alguien identifica como efecto HUMINT [inteligencia humana], pero ellos mismos han entresacado la inteligencia y la han compartido y JSOC saca a esas personas y así es cómo trabaja”.
Además de trabajar en planeamiento de ataques de acción encubierta y bombardeos con abejones, “Blackwater SELECT” también proporciona guardias privados dentro de Pakistán para cumplir tareas sensibles de seguridad en resguardo de bases secretas de drones de Estados Unidos, instalaciones del JSOC y recintos de la Agencia de Inteligencia de la Defensa (DIA, sigla en inglés).
La capacidad de Blackwater de sobrevivir a las críticas y de reinventarse y reposicionarse es más evidente en Afganistán. Allí, la compañía continúa trabajando para los militares de Estados Unidos, la CIA y el departamento de Estado a pesar de intensas críticas y escándalos casi semanales.
Estudiantes investigadores:
Andrew Hobbs, Kelsea Arnold and Brittney Gates, Sonoma State University
Evaluadores académicos:
Elaine Wellin y Peter Phillips, Sonoma State University
Fuentes:
- Jeremy Scahill, “The Secret US War in Pakistan,” The Nation, November 23, 2009, http://www.thenation.com/doc/20091207/scahill
- Jeremy Scahill, “Blackwater Wants to Surge Its Armed Force in Afghanistan,” Antiwar.com, January 20, 2010, http://original.antiwar.com/scahill/2010/01/19/blackwater-wants-to-surge/
- David Edwards and Muriel Kane, “Ex-employees claim Blackwater pimped out young Iraqi girls” Raw Story, August 7, 2009
Jeremy Scahill (THE NATION). Traducción: Ernesto Carmona (especial para ARGENPRESS.info)