Ha entrado en vigor en España la nueva regulación sobre el aborto .
"La ley de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo" se pone en la práctica con el rechazo de los sectores más conservadores, incluida la jerarquía de la Iglesia católica española.
Para la Asociación de Clínicas Autorizadas para la interrupción del embarazo de España, la nueva reglamentación supone un avance y confirma que la misma fue cuidadosamente concebida.
Pero algunas comunidades autónomas gobernadas por la derecha del Partido Popular han anunciado que no cumplirán la ley y que derivarán a otras comunidades los casos de abortos.
Por el contrario, muchos sectores progresistas están satisfechos con el resultado de la Ley. Aseguran que no incita a las mujeres a abortar, sino que lo que hará es no penalizar, ni criminalizar a aquellas mujeres que tengan que interrumpir su embarazo, teniendo la mejor asistencia sanitaria posible.
La nueva ley establece que desde el pasado lunes, 5 de julio, se podrá abortar hasta la semana 14 de gestación, incluyendo las jóvenes de 16 y 17 años, que no necesitarán permiso de los padres, aunque uno de ellos deberá ser informado.
Los partidos de izquierda denuncian lo que consideran la postura cínica del Partido Popular que cuando está en el poder no deroga las leyes de aborto y cuando está en oposición lo utiliza como argumento de disputa política.
