
Es un grupo de características totalitarias que se presenta bajo la forma de asociación o grupo religioso, cultural, científico, terapéutico, político..., que exige la absoluta devoción o dedicación de sus miembros a alguna persona o idea mediante el uso de técnicas de manipulación, persuasión y control para conseguir los objetivos del líder y/o del grupo (poder y dinero), provocando en los adeptos una total dependencia de líder y/o grupo, en detrimento real o posible de ellos mismos y de su entorno familiar o social.
Cualquier persona puede serlo, si se la capta en el momento oportuno.
Factores de riesgo
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Encontrarse en un estado de crisis, insatisfacción o inestabilidad a nivel emocional, afectivo, social, de estudios, laboral o profesional.
Estar en desacuerdo con la sociedad y con sus normas.
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Ser joven.
Nivel socioeconómico y cultural medio o alto.
Inquietudes intelectuales y/o religiosas.
Ingenuidad e identidad no consolidadas.
Tendencia a la personalidad dependiente.
Soledad.
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Ser altruista.
NOTA:
Estas características no son excluyentes, ya que a pesar de ser factores de especial predisposición, no resultan imprescindibles para que una persona pueda ser captada por un grupo totalitario."Nací dividida entre dos creencias, por parte de la familia de mi padre son católicos y por parte de mi mama, mormones. Ellos por muchos años no estuvieron casados por la Iglesia ya que se les había ordenado por parte de mi abuela ..."
Éste puede ofrecer amistad, seguridad y apoyo a todos los niveles, incluida la seducción sexual, con el objetivo de ganarse la confianza del neófito para introducirlo en el grupo.
Bombardeo afectivo:
Se provoca un sentido de familia o pertenencia al grupo, a partir de la creación de un entorno agradable y distendido que incite a la confianza plena y a un sentimiento de plenitud. El recién llegado se sentirá "importante", elegido, el centro de atención de todos los demás.
Seguimiento del neófito:
Contactos frecuentes con todos aquellos que han entrado en el grupo para que cada día tengan más interés en dedicarse plenamente a éste.
Presión del grupo:
Anulación de las dudas y de la resistencia a las nuevas ideas, lograda a partir de potenciar la necesidad natural de integración al grupo, inherente a la mayoría de seres humanos.
Falsa exaltación de los valores individuales: (en dos vertientes)
- Se potencia la sobrevaloración de la persona, lo que genera un compromiso y una necesidad de pertenencia al grupo.
- Se resaltan los defectos, los errores, y la necesidad de la persona captada para que el grupo sea la única solución a sus problemas.
Técnicas de manipulación psicológica más utilizadas (II)
De adoctrinamiento
p>Rechazo de los propios valores: Aceptación del nuevo estilo de vida, basándose en un progresivo rechazo de los valores que se tenían antes de entrar en contacto con el grupo.
Sustitución de las relaciones personales:
Destrucción de los lazos familiares, ideando nuevos matrimonios y familias (el grupo es la "nueva familia"); rechazo de los vínculos anteriores (amigos, creencias, intereses).
Compromiso económico:
Aumento de la dependencia hacia el grupo, con la obligación de aportar dinero o bienes personales o familiares. Si esto no se produce, existe la obligación de trabajar gratuitamente para el grupo, o bien de solicitar préstamos a bancos, familiares o amigos, para favorecer a la organización.
Técnicas de inducción hipnótica:
Estados se sugestión inducidos por vía hipnótica, a menudo disfrazados sutilmente como meditaciones.
Martilleo del subconsciente:
Implantación de mensajes subliminales mediante el uso repetitivo de ciertas palabras o frases clave introducidas en medio de largas y confusas charlas.
Cánticos y plegarias:
Se suprime todo lo que resulte ajeno al grupo, hecho al que contribuye la repetición de cantos o frases que bloquean la mente frente a las ideas que provienen del exterior.
Destrucción de las relaciones familiares y de las amistades.
Pérdida del puesto de trabajo o descenso a una categoría inferior o abandono de los estudios por falta de rendimiento (intelectual o físico).
Aislamiento respecto al entorno.
Alteración del descanso.
Deterioro del estado general y/o evolutivo.
Desnutrición (se puede llegar a estados caquécticos).
Pérdida de la menstruación en las mujeres. Diversos trastornos hormonales.
Disminución de las defensas orgánicas.
Desregulación o inestabilidad emocional. Cambios frecuentes entre estados eufóricos y depresivos.
Incapacidad para mantener relaciones afectivas normales con personas ajenas al grupo.
Pérdida del libre albedrío, esclavitud "voluntaria".
Disminución de la capacidad intelectual, reducción del vocabulario y pérdida del sentido del humor.
Tendencias neuróticas, psicóticas o suicidas.
Alucinaciones, pánico, confusión mental, desdoblamiento de la personalidad (estados disociados), culpabilidad, pérdida de la identidad.
Inducción a la dependencia.
Falsa mejora de la autoestima y de la seguridad.
Estados de infantilización.
Tener presente que es víctima del grupo.
Solicitar ayuda a profesionales del área de la salud mental, (médicos, psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales...), preferentemente con conocimientos sobre el fenómeno sectario.
Tener mucha paciencia, no ceder a las presiones y chantajes del adepto y del grupo.
Desconfiar de lo que dicen los adeptos: hablan por boca del grupo.
No dejarse atemorizar por el fabuloso poder económico del grupo. Hay que actuar con prudencia, pero con decisión.
Tener presente que es víctima del grupo.
Solicitar ayuda a profesionales del área de la salud mental, (médicos, psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales...), preferentemente con conocimientos sobre el fenómeno sectario.
Tener mucha paciencia, no ceder a las presiones y chantajes del adepto y del grupo.
Desconfiar de lo que dicen los adeptos: hablan por boca del grupo.
No dejarse atemorizar por el fabuloso poder económico del grupo. Hay que actuar con prudencia, pero con decisión.
Las personas que nos ofrecen respuestas, fórmulas o soluciones mágicas a los problemas del mundo.
Las invitaciones o comidas comunitarias, fines de semana maravillosos, conferencias informativas, cursos gratuitos, etc... por parte de grupos y organizaciones de filiación desconocida.
Las propuestas a participar "en algo que otros ya están haciendo", sin entrar en explicaciones.
Los grandes proyectos de vida alternativa que no explican con exactitud qué hay realmente detrás.
Las personas que ofrecen una amistad instantánea exagerada, increíble a primera vista (los captadores acostumbran a ser personas entrenadas en técnicas de mercado y de relaciones públicas).
Los ofrecimientos de contratos de trabajos fáciles, los cursillos de iniciación al conocimiento de la mente, los fascinantes métodos de relajación.. pueden ser trampas perfectas para caer en un grupo totalitario.
Estar alerta ante todo esto te ayudará a evitar a los grupos totalitarios; utiliza la INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN con personas que no sean del grupo. Éstas son las mejores herramientas preventivas.
Y recuerda que:
Quienes se creen inmunes pueden ser, por ese mismo hecho, los más vulnerables. Recuerda que el ataque de los grupos totalitarios actúa sobre tus sentimientos y tu parte afectiva, no sobre tu inteligencia.