Fuentes de la Sede Apostólica confirmaron que el episodio fue “sorpresivo”, provocó “consternación” y sugirieron la posibilidad que se inicie un juicio eclesiástico contra del prelado por sus acciones.
Vie, 02/10/2009 – 10:40
Ciudad del Vaticano.- El Vaticano aceptó la renuncia del obispo canadiense Raymond John Lahey, arrestado por posesión de material pornográfico infantil, un hecho que conmocionó a las autoridades de la Santa Sede.
Fuentes de la Sede Apostólica confirmaron a Notimex que el episodio fue “sorpresivo”, provocó “consternación” y sugirieron la posibilidad que se inicie un juicio eclesiástico contra del prelado por sus acciones.
El pasado 26 de septiembre, mientras el Papa Benedicto XVI se encontraba cumpliendo un viaje apostólico a la República Checa, la sala de prensa vaticana publicó la dimisión.
“El santo padre aceptó la renuncia al gobierno pastoral de la diócesis de Antigonish (Canadá), presentada por Raymond John Lahey en conformidad al canon 401.2 del Código de Derecho Canónico”, indicó el breve comunicado.
Ese apartado de la ley fundamental de la Iglesia católica establece a la letra: “se ruega encarecidamente al obispo diocesano que presente la renuncia de su oficio si por enfermedad u otra causa grave quedase disminuida su capacidad para desempeñarlo”.
Lahey, de 69 años y desde 2003 pastor de Antigonish, fue detenido el pasado 15 de septiembre por la policía aduanal en el aeropuerto de Ottawa tras un “control de rutina” sobre su computadora personal y “otros instrumentos de comunicación”.
En la memoria de la máquina, decomisada por los uniformados, se encontró material pedo-pornográfico. Tras permanecer arrestado durante unas horas el religioso fue puesto en libertad.
Las investigaciones posteriores llevaron a las autoridades a incriminarlo de cargos por “posesión e importación de pornografía infantil” y emitir un mandato de arresto.
Este día, el ahora obispo emérito, se presentó por propia voluntad en la estación de policía de Ottawa y según informes de prensa canadiense se prevé su comparecencia ante las cortes el próximo 4 de noviembre.
Lahey, en agosto pasado, había adquirido cierta notoriedad por una aparición televisiva en la cual anunció que su diócesis había aceptado pagar unos 12 millones de dólares a un grupo de víctimas de abusos sexuales de sacerdotes.
En esa oportunidad pidió perdón a los afectados y sus familias augurando “no tener nunca más que encontrarse ante reprobables comportamientos similares”.