En respuesta a las constantes incursiones de las fuerzas de ocupación israelí a la sagrada Mezquita Al-Aqsa y los ataques contra los palestinos, la Resistencia Nacional Palestina en la Franja de Gaza lanzó la operación “Tormenta de Al-Aqsa”.
En esta operación, miles de cohetes fueron lanzados contra los asentamientos israelíes en los parámetros de Gaza y en las tierras palestinas ocupadas en 1948.
La Resistencia Palestina también anunció un estado de guerra abierta contra las fuerzas de ocupación en todas las áreas de Cisjordania.
Los medios de comunicación palestinos informaron que la Resistencia Palestina bombardeó con misiles los asentamientos de ocupación en Tel Aviv y Ascalón, ubicados en las tierras ocupadas en 1948 y las cercanías de la Franja de Gaza, en respuesta a los continuos crímenes cometidos contra los palestinos.
“La Resistencia logró capturar soldados israelíes durante las operaciones de incursión en algunas de las colonias adyacentes a Gaza, donde se libraron enfrentamientos entre los combatientes de la Resistencia y las fuerzas de ocupación, así como tomó el control de un vehículo militar israelí durante su operación en Gaza”, detallaron los medios palestinos.
En paralélelo, los medios de comunicación del enemigo israelí reconocieron que un número sin precedentes de cohetes impactaron en los asentamientos israelíes, y las sirenas de alarma seguían sonando mientras se abrían refugios, así como reconocieron que varios colonos perecieron mientras otros resultaron heridos.
Al respecto, las fuerzas israelíes cerraron todos los puntos de control militares alrededor de la ciudad ocupada de Jerusalén y prohibieron completamente el movimiento hacia y desde la ciudad.
En este contexto, dos palestinos murieron y otros cinco resultaron heridos por disparos de las fuerzas de ocupación israelíes en el campamento de Al-Bureij en el centro de la asediada Franja de Gaza.
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