El anuncio de una supuesta prueba contra el presidente peruano, Pedro Castillo, acentuó hoy el asedio mediático y político al mandatario tras asegurar que de ninguna manera dejará el país ante las investigaciones en su contra.
La televisora Panamericana, fuertemente opositora, difundió nuevas declaraciones, oficialmente reservadas, del ex secretario presidencial Bruno Pacheco, bajo detención domiciliaria y convertido en colaborador de la Fiscalía con el fin de aminorar su pena por los cargos de corrupción que enfrenta.
Según el reportaje, Pacheco habría entregado a la fiscalía notas manuscritas de Castillo de 2021, con indicaciones de traslado de un oficial de la Policía al Palacio de Gobierno y cambio de colocación de otro, lo que se hizo efectivo.
También habría recomendado mediante Pacheco el ascenso de un coronel del Ejército al grado de general, esto último rechazado por el entonces jefe del Ejército, general José Vizcarra, quien poco después fue cesado por el mandatario.
El exsecretario habría dicho también que uno de los escoltas de Castillo entregó a este dinero por favorecer el ascenso de un oficial de Policía, según filtraciones que el abogado de Castillo, Benji Espinoza, califica como violación del secreto de los testimonios ante la Fiscalía y responsabiliza a esta por ello.
Horas antes del informe, Castillo rechazó especulaciones sobre su supuesta intención de aprovechar un viaje oficial para escapar de las investigaciones de la Fiscalía Anticorrupción.
"Quienes hablan de fuga son los que tienen experiencia", dijo en tácita referencia al exgobernante Alberto Fujimori, hoy en prisión, que tras un viaje oficial escapó de un escándalo de corrupción fugando a Japón y renunciado desde allí.
Atribuyó la versión a quienes no quieren que un campesino sea presidente y aseguró que "yo jamás tengo pensado salir de este país", llamó "a la más amplia unidad" e instó a la sociedad y a la clase política del país a "voltear la página", es decir dejar los enfrentamientos.
Entretanto, una nueva encuesta de la empresa Ipsos-Perú consignó hoy que la aprobación al mandatario alcanzó 25 por ciento, cinco puntos más respecto a julio pasado, y la desaprobación bajó en igual medida a 69 por ciento.
Por su parte, el Parlamento, cuya mayoría dos veces no ha podido vacar (destituir) a Castillo y prepara un nuevo intento, alentada por las investigaciones de la Fiscalía, continúa en una posición peor que la de Castillo, pues registró 13 por ciento de aprobación y 81 por ciento de desaprobación.
El sondeo indica que 61 por ciento de los encuestados opinan que Castillo debe renunciar, mientras 36 por ciento plantean que debe mantenerse en el poder hasta el fin del mandato para el que fue elegido, en 2026.
Lima, 15 ago (Prensa Latina)