Aún no se conoce la identidad del contratista (sic) de EU supuestamente asesinado en Kirkuk por las milicias chiítas proiraníes, lo cual desató la grave crisis medioriental.
Después del asesinato del icónico general iraní Soleimani por órdenes de Trump, postulé: “De dos cosas una, o las dos: el asesinato del legendario, además de piadoso chiíta, general Soleimani –quien viajó en forma asombrosa en un vuelo comercial de Damasco al aeropuerto internacional de Bagdad donde fue recibido por al-Muhandis–, fue producto de un engaño de EU para negociar tras bambalinas, o bien expuso inconcebibles grietas en el aparato de contrainteligencia de Irán en Irak” (https://bit.ly/2T0Q6Bp).
Tres días después se sabe que fue una doble trampa de Trump, en connivencia con su aliado: el saliente primer ministro Netanyahu.
El connotado investigador Jefferson Morley asevera que Trump tiró del gatillo después que el Mossad tenía en la mira a Soleimani (https://bit.ly/2N0H4R2). Jefferson Morley divulga que el pasado octubre, Yossi Cohen, mandamás del Mossad de Israel, habló abiertamente del asesinato del general iraní Soleimani que sería consistente con la doctrina israelí ya que absorbería a EU a una guerra con Irán (https://bit.ly/2Qz0deU).
Amos Harel, del rotativo israelí Haaretz, expone que es razonable suponer que EU alertó a Israel sobre el inminente (sic) asesinato ya que la declaración de Netanyahu antes (sic) de viajar a Grecia pareció como un indicio (¡mega-sic!) ligeramente muy explícito de lo que iba a suceder en Irak horas mas tarde.
La declaración premonitoria (sic) de Netanyahu: Eventos muy dramáticos suceden en nuestra región, los estamos siguiendo cercanamente y estamos en contacto constante con nuestro gran amigo EU (https://bit.ly/36zy0Kz).
Aluf Benn, del Haaretz, exulta que Netanyahu –quien se solidarizó con su aliado Trump, para luego lavarse farisea e impúdicamente las manos –(https://bit.ly/2Fum9Si) resultó el gran triunfador del asesinato (https://bit.ly/2SXzCKp).
Pero, ¿a qué fue Soleimani tan desparpajado a Bagdad?
Kim Sengupta, del The Independent, expone que el general iraní fue atraído por un doble engaño de Trump, según confesión del saliente primer ministro iraquí Adil Abdul-Mahdi (https://bit.ly/2Fq1Zc2).
Trump había rogado al primer ministro iraquí su intermediación para disminuir la tensión regional entre Irán y Arabia Saudita, cuya encomienda recayó en Soleimani, quien también intervino para levantar el sitio de la embajada de EU en Bagdad por las milicias chiítas proiraníes, a cambio de estudiar en el Parlamento iraquí la salida del ejército de EU en Irak.
Soleimani, quien viajó con pasaporte diplomático, llevaba la respuesta de Irán para su desescalada con Arabia Saudita.¡De tal magnitud fue el doble engaño de Trump, sugestionado por Netanyahu, para asesinar al icónico Soleimani!
Tres días después de su asesinato, Soleimani –canonizado como “el Che Guevara del mundo islámico”– cobró dos triunfos estratégicos, como el legendario Cid Campeador, quien fallecido seguía cobrando victorias en Andalucía: 1. El Parlamento árabe de Irak exigió la expulsión del ejército de ocupación de EU; y 2. Irán anunció en forma inespecífica la reanudación de su enriquecimiento nuclear.
Mas allá de la canonización del general iraní Soleimani, quien ingresó al panteón hagiográfico del esoterismo chiíta, el ludópata Trump exhibe la preocupante acefalia estratégica de EU –donde impera el caos y la confusión– que provoca cefaleas globales, la cual no tendría importancia si no se tratase de la segunda superpotencia nuclear del planeta.
¿Qué mandatario suicida en el mundo se atreverá de ahora en adelante a negociar en forma triangulada o directamente con Trump, quien no ha perdido su hábito lúdico de apostar en las delicadas relaciones internacionales, como si fuera una vulgar partida de póker en uno de sus casinos?
El zar Vlady Putin acudió a Siria y Turquía cinco días después del asesinato preprogramado del general Soleimani para recordar al ludópata Trump la existencia de líneas rojas que no respeta (https://bit.ly/37FHfZO).
Blog del autor: www.alfredojalife.com