El Gobierno español de Mariano Rajoy inició este miércoles la deportación masiva de decenas de refugiados que tenían mes y medio detenidos en el Centro de Internamiento de Migrantes, en la provincia española de Málaga, que permanece abierto de forma irregular mientras se instala la futura cárcel de Archidona.
Pese a que movimientos ciudadanos exigieron la paralización de las deportaciones de los migrantes, el Ministerio de Interior aceleró la expulsión de los ciudadanos, que permanecen allí desde el pasado 20 de noviembre de forma irregular y sin haber cometido ningún delito.