El General de División Pedro Altamirano, nació en el sector de Suni, municipio de San Rafael del Norte, departamento de Jinotega , el 24 de septiembre de 1870, MURIO: 29 de noviembre de 1937
Pedro Altamirano fue un campesino y guerrillero nicaragüense, conocido como "Pedrón", alcanzó el grado de General de División en el Ejército Defensor de la Soberanía Nacional (EDSN), llegando a ser Jefe de Estado Mayor del mismo y fue reconocido como el máximo lugarteniente de Augusto C. Sandino y uno de sus Generales más leales.
Descendiente de una familia campesina, de la cual aprendió el oficio de agricultor, trabajó de campista, peón de finca ganadera y domador de potros cimarrones.
Estuvo casado con María de Altamirano con quien procreó varios hijos.
En 1927, a los 57 años de edad se integró a la lucha por la liberación de Nicaragua como soldado del Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua (EDSNN).
No sabía leer, ni tenía conocimiento alguno sobre tácticas y estrategias militares, pero aprendió en corto tiempo. Conocedor de las montañas del norte del país, aspecto relevante para el cumplimiento de las distintas misiones combativas.
Se destacó en los cargos de: jefe de columna, jefe de zona de operaciones y jefe de campo de operaciones, que comprendían los departamentos de Jinotega, Matagalpa, Chontales y Bluefields.
El Héroe Nacional General de Hombres Libres Augusto C. Sandino, Jefe Supremo del EDSNN, ante su viaje a los Estados Unidos Mexicanos en el período 1929-1930, lo designó al mando del Ejército.
En reconocimiento a su destacado desempeño el General Pedro Altamirano fue ascendido al grado militar de General de División el 6 de mayo de 1931.
En medio de las múltiples misiones combativas aprendió a leer y escribir, y sobre su rápido aprendizaje, el General Augusto C. Sandino expresó lo siguiente:
“Durante los azares de la lucha y a pesar de su edad, solamente porque yo se lo ordené, Altamirano aprendió a leer y escribir cancaneando y cacarañando, pero ha progresado mucho y ahora, asómbrese, también sabe escribir en máquina, pero con un sólo dedo”.
A lo largo de su participación en contra de la intervención militar estadounidense, se destacó en la batalla de Saraguazca el 19 de junio de 1930; en ataques y combates en: Matiguás, departamento de Matagalpa en 1930; La Libertad, Santo Domingo y El Jabalí, departamento de Chontales en 1931, entre otros.
En consecuencia de la firma del Convenio de Paz del 20 de enero de 1933, el General de División Pedro Altamirano ocupó el cargo de Jefe del Estado Mayor del EDSNN y el General de División Francisco Estrada asumió el mando de las Fuerzas de Emergencia.
Demostró su elevada habilidad de sobrevivencia en las montañas, creatividad para lograr el enmascaramiento, el sigilo de la movilidad y el desplazamiento de sus tropas, lo que le permitió contundencia y certeza en cada una de sus acciones militares.
Participó y dirigió importantes combates, ataques y emboscadas demostrando gran capacidad y habilidad en la lucha contra la intervención militar estadounidense. Aportó a la organización, realización y efectividad de las emboscadas.
En los momentos previos del viaje del General Sandino a Managua, el 16 de febrero de 1934, en Wiwilí el General de División Pedro Altamirano estuvo en silencio por varias horas y con su voz ronca le suplicó “…no vaya General…”rompiendo en llanto e insistiéndole que no viajara ante el presentimiento que fuera asesinado por la Guardia Nacional.
Después del asesinato del General Sandino el 21 de febrero de 1934, el General de División Pedro Altamirano continuó luchando por la libertad de la República de Nicaragua.
Fue infiltrado por la Guardia Nacional por orden del General de División Anastasio Somoza García, quienes logran el 29 de noviembre de 1937 asesinarlo a traición.
El General de División Pedro Altamirano, hombre de principios morales y patrióticos. Se caracterizó por su fidelidad a la patria, lealtad absoluta al General Sandino y férrea disciplina. De gran valentía, de sacrificio sin límite, de hermandad, de dignidad y honradez demostrada.
De inmenso amor a la libertad, de firme decisión al cumplimiento de su deber, de honor, de extraordinario patriotismo, anti intervencionista y anti imperialista. Su ejemplo y legado de lucha perdura en Nicaragua y en especial en el Ejército de Nicaragua.
El Comandante en Jefe del Ejército de Nicaragua, General de Ejército Julio César Avilés Castillo a través de la Orden Nº 45 del 25 de octubre de 2010 instituyó que el nombre oficial del Comando de Operaciones Especiales es “Comando de Operaciones Especiales General de División Pedro Altamirano” y mediante la Orden Nº 1219 del 21 de octubre de 2011 le otorgó póstumamente la Medalla “Honor al Mérito Militar Soldado de la Patria”, como justo reconocimiento a su legado histórico y patriótico.