A primera vista, puede parecer que las recientes declaraciones de Donald Trump y Emmanuel Macron respecto a la situación en Siria han abierto una nueva página del prolongado conflicto en este país árabe.
No obstante, hay varios motivos poco visibles que se ocultan tras las palabras de los dos mandatarios.
Después de la reunión del 13 de julio, el presidente de EEUU, Donald Trump, y su homólogo francés, Emmanuel Macron, propusieron establecer un grupo de contacto compuesto por los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU y un representante del mandatario sirio, Bashar Asad, entre otras "partes interesadas". Dicho grupo se encargará de estabilizar la situación política en el territorio.
El líder galo también apuntó que París había cambiado su postura acerca de la situación en Siria y ya no exige la destitución de Asad. Trump, por su parte, propuso establecer una "segunda tregua" en el noreste del país.
El jefe del Comité de Asuntos Internacionales del Senado ruso, Konstantín Kosachov, comentó en su página de Facebook las recientes declaraciones de Trump y Macron.
"La propuesta de los líderes de EEUU y Francia de formar un grupo de contacto para establecer una hoja de ruta sobre el futuro de Siria (…) puede llegar a ser un formato muy válido para la cooperación, puesto que se cumplen dos condiciones: que no se perjudique el proceso de negociaciones en Ginebra y Astaná y que sea una decisión seria", escribió Kosachov.
Además, el senador agregó que Rusia está dispuesta a considerar cualquier idea constructiva siempre que "con tales condiciones previas no se socave el proceso político en un país soberano".
Por su parte, Andréi Koshkin, jefe del Departamento de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad rusa de Economía Plejánov, comentó a medios locales que este tipo de iniciativas por parte de Occidente puede considerarse como una imitación de los proyectos propuestos y promovidos por el país eslavo y que involucran a Irán, Turquía y Damasco.
"De hecho, es preocupante que estas iniciativas suelan aportar no solo contradicciones, sino una 'disfunción' en el proceso de solución al conflicto en Oriente Próximo y, en particular, en Siria, cuando a este proceso se suman EEUU y los países europeos.
Y no es la primera vez", sostuvo el experto.
Koshkin también señaló que Washington intenta "arrimar el ascua a su sardina" y declarar su posición dominante cada vez que se une a cualquier grupo.
Al mismo tiempo, todas las actividades propuestas por EEUU conducen, paradójicamente, a una escalada de tensiones.
Asimismo, señaló que el hecho de que Washington forme diferentes comités, comisiones y coaliciones en Oriente Próximo implica que existe un tipo de "competitividad con las fuerzas que están mucho más interesadas en la resolución de la situación".
Le puede interesar: Trump y Macron examinan la seguridad y la lucha antiterrorista
Koshkin consideró que la "segunda tregua" en el noreste de Siria, propuesta por Trump, es un compromiso de EEUU para participar activamente en la etapa final de la división de las zonas de influencia y áreas de responsabilidad" en Siria.
"Lo más interesante es que EEUU involucra a sus aliados —a los países europeos que integran la OTAN—. La zona donde se establezca esta 'segunda tregua' podría convertirse en una prerrogativa para EEUU", destacó.
Abordando el tema del cambio de la doctrina de Francia acerca de Asad, Koshkin apuntó que es importante que París haya aceptado el hecho de que "las fuerzas gubernamentales de Siria, encabezadas por Bashar Asad, sean un poder real que lucha contra Daesh" —organización terrorista proscrita en Rusia y otros países—.
A su juicio, una vez se alcance el éxito en el país árabe empezarán a funcionar los procedimientos democráticos, tales como la adopción de una nueva Constitución.
Asimismo, se convocarán elecciones en las que el pueblo sirio elegirá a su nuevo líder.
No obstante, tanto Donald Trump como Emmanuel Macron quieren "construir una combinación gris que limitaría en gran medida al presidente sirio, Bashar Asad, y les proporcionaría la oportunidad de llevar a cabo sus propios proyectos políticos".
"Macron quisiera acumular capital político y autoridad. Trump, por su parte, se ve obligado a promover los proyectos al estilo estadounidense con el fin de mejorar su posición en EEUU y, sobre todo, dentro de las élites políticas del país", concluyó.
https://mundo.sputniknews.com/orientemedio/201707171070824287-siria-futuro-trasfondo-eeuu-francia/
