A pesar de la sólida recuperación de la economía en el país, dice el Financial Times, los datos oficiales muestran que 1,85 millones de españoles de menos de 34 años están desempleados. Las consecuencias de esta situación pueden ser desastrosas para los jóvenes que tienen que hacer frente a esa realidad.
El diario económico hace referencia a las estadísticas que reflejan que uno de cada cinco jóvenes españoles no tiene trabajo ni está estudiando. Miles de ellos han emigrado para trabajar fuera del país, y los pocos que encuentran un empleo en España tienen qur sobrevivir con sueldos bajos y unas condiciones precarias.
“No sólo hace a los jóvenes pobres, sino también enfermos. Los psicólogos españoles han estado advirtiendo durante años de que la generación que se encuentra en esta situación está sufriendo más allá de los que dicen las estadísticas económicas y del mercado laboral“, dice el rotativo.
Según Joseph Blanch, profesor de psicología social aplicada en la Universidad Autónoma de Barcelona citado por el diario, “sin un trabajo seguro, tu vida carece de certeza y seguridad… No puedes hacerte una idea de cuando vas a poder tener hijos y formar una familia. Se pierde la capacidad de planificar y dirigir tu propia vida, es como tratar de conducir un coche sin un volante”.
En resumen, la condena a “vivir en una adolescencia permanente”, con un bloqueo de la madurez y la independencia consecuencia del panorama del mercado laboral. Entre los síntomas más comunes entre estos jóvenes sin empleo están la ansiedad o la depresión.