El poderío y la influencia de Al-Qaeda han aumentado de manera significativa, mientras que los grupos armados sirios están en su punto más débil.
Los últimos acontecimientos en Siria, asegura el portal Web estadounidense Foreign Policy, muestran que la oposición armada pasa por sus peores momentos, ya que cada día pierde más y más terreno frente a los grupos de tendencia más extremista.
En concreto, el grupo terrorista Frente Fath al-Sham (antiguamente conocido como Frente Al-Nusra) y la banda Ahrar al-Sham, son dos grupos terroristas que han conseguido amentar su poderío en el norte de Siria y que amenazan con erradicar a los grupos armados con menos tendencias extremistas.
El autodenominado Ejército Libre de Siria (ELS) ha sido uno de los que más ha visto perjudicada su posición en Siria, ya que en los últimos meses decenas de sus integrantes y miembros de otros grupos armados se han unido a las filas de Ahrar al-Sham o el Frente Fath al-Sham.
El análisis de Foreign Policy —que fue publicado el miércoles— identifica a la insistencia de una victoria militar de los dos grupos extremistas en una victoria militar contra el Gobierno sirio y su oposición a cualquier arreglo con Damasco, como dos de los factores del aumento de su popularidad entre los opositores sirios y los insurgentes.
Del mismo modo, la apuesta del ELS por un arreglo político y su participación en algunas de las rondas de negociaciones han sido dos de los puntos que los opositores sirios no ven con buenos ojos y por eso prefieren al grupo salafí Ahrar al-Sham y al representante de Al-Qaeda en Siria.
Sin embargo, al mismo tiempo el incremento del poderío de estos está aumentando cada vez más las probabilidades de que uno de ellos, o en el peor de los casos, los dos, establezca un llamado “califato” al estilo del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) y trate de hacer lo mismo que hizo Daesh (ya hay reportes de los intentos del Al-Qaeda sirio para crear un nuevo califato).
Para poder establecer un “califato”, el Frente Fath al-Sham tendría que ganarse el apoyo de Ahrar al-Sham, algo que no ha podido hasta ahora, además de que los dos grupos se enfrentan militarmente en muchas zonas.
A su vez, las grandes ambiciones del Al-Qaeda sirio y las tensiones internas entre las filas de los grupos armados y terroristas supondrían una gran oportunidad para las fuerzas sirias y sus aliados para continuar sus avances y liberar más zonas, ya que dichas bandas estarían más debilitadas, algo que al parecer están haciendo.
http://www.hispantv.com/noticias/siria/335934/alqaeda-tragar-oposicion-fath-sham