Este viernes, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha aprobado la resolución contra los asentamientos de Israel en territorio palestino.
De los 15 países que conforman ese organismo, 14 han votado a favor. Por su parte, Estados Unidos no ha ejercido su derecho de veto y se ha abstenido, con lo cual ha permitido que el texto saliera adelante.
Este documento destaca que la presencia israelí en los territorios ocupados, incluido Jerusalén Este, supone una violación del derecho internacional y un grave obstáculo para solucionar el conflicto a través de la creación de dos estados independientes, según indica la agencia TASS.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha exigido que Israel cese "de forma inmediata y completa" cualquier actividad relacionada con los asentamientos y ha instado a las dos partes en conflicto a luchar contra el terrorismo y la incitación a la violencia.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha estimado la resolución aprobada como "un paso importante que demuestra el liderazgo necesario del Consejo y los esfuerzos colectivos de la comunidad internacional que confirman que la existencia de los dos Estados sigue siendo alcanzable".
Palestina ha indicado que la resolución de la ONU supone "un gran golpe" para Israel.
Israel no acatará la resolución
El gabinete de Netanyahu ha señalado que Israel no acatará la resolución de la ONU, según indica AFP.
Tras de la votación, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha llamado a consultas a sus embajadores en Nueva Zelanda y Senegal.
El 21 de diciembre, Netanyahu utilizó su cuenta de Twitter para recordar a EE.UU. que debería vetar esta "resolución anti Israel".
"La actividad de Israel amenaza la coexistencia pacífica de los dos Estados"
El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, ha declarado que "aunque no estamos de acuerdo con todos los aspectos de esta resolución, ella con razón condena la violencia, la incitación, la actividad de los asentamientos e insta a las dos partes a tomar medidas constructivas".
El asesor del presidente de EE.UU., Ben Rhodes, ha declarado que la actividad por parte de Israel "amenaza la coexistencia pacífica de los dos Estados". Ha destacado que "la actividad se ha intensificado durante los últimos años, sobre todo después del 2011 cuando vetamos [una resolución semejante]". Ha señalado que la condena de la política de asentamientos de Israel es consistente con "la política de EE.UU., que es apoyada por ambos partidos".
La embajadora de EE.UU. ante la ONU, Samantha Power, ha destacado que "no se puede abogar por asentamientos y la solución de los dos Estados" al mismo tiempo. Ha señalado también que EE.UU. no vetó la resolución, ya que "refleja los hechos en el terreno y es consistente con la política estadounidense".
"La resolución de la ONU con razón condena la violencia, la incitación, la actividad de los asentamientos e insta a las dos partes a tomar medidas constructivas"
John Kerry, secretario de Estado de EE.UU.
La votación estaba prevista para el 22 de diciembre, pero la delegación de Egipto —que había presentado el proyecto de resolución al Consejo de Seguridad—, pospuso el proceso. Finalmente, se ha sometido a consulta este viernes por las delegaciones de Nueva Zelanda, Malasia, Venezuela y Senegal, coautores del texto.
Se trata de la primera resolución acerca del conflicto entre Israel y Palestina en casi ocho años.
Las autoridades militares de Israel controlan actualmente todo el territorio del antiguo Mandato Palestino asignado al Reino Unido por la Sociedad de Naciones, excepto la franja de Gaza.
La resolución 181 de las Naciones Unidas partió esas tierras en dos Estados: el árabe y el judío.
Esta decisión nunca ha sido completamente observada e implementada por las partes.
Esta decisión nunca ha sido completamente observada e implementada por las partes.
La primera guerra árabe-israelí (1948-49) tuvo como desenlace el establecimiento de Israel, mientras que el resto de territorios palestinos fueron incorporados a Jordania y Egipto.
Israel consiguió el control de todas las tierras palestinas después de la guerra de 1967.
Tras la fundación de la Autoridad Nacional Palestina en 1994, Israel nunca le ha cedido a esa organización el total control sobre Cisjordania, ni mucho menos sobre Jerusalén Este, que según las leyes israelíes forma parte de la capital nacional.
La resolución propuesta por Egipto esta semana niega la pertenencia de Jerusalén Este al Estado israelí.