El pasado 9 de octubre, la doctora Tamika Cruz estaba en un vuelo rumbo a Minneapolis cuando la tripulación solicitó la ayuda de un doctor. Algo iba mal con otro pasajero, que se encontraba a 2 filas delante de ella y necesitaba ser tratado por un médico.
Cruz ofreció su ayuda al instante, haciendo señas a una de las azafatas.
Sin embargo, recibió una respuesta lapidaria que la dejó helada:
"Oh no, cariño, baja la mano. Buscamos médicos o enfermeras, o algún tipo de personal médico, no tenemos tiempo para hablar contigo", recordó Cruz las palabras de la azafata.
Aquella asistente de vuelo negó a Cruz ejercer su trabajo como médico cuando otro pasajero necesitaba su ayuda.
Pero, ¿por qué sucedió algo así? Según la opinión de la doctora, porque es negra.
Después de aquello, Cruz publicó su experiencia en Facebook y, sin esperarlo, su comentario se compartió más de 34.000 veces durante la noche del 10 de octubre.
En éste, comentó que estaba "harta de sentirse despreciada" como mujer negra en su profesión. También aprovechó para acusar a la compañía aérea, Delta, de "discriminación flagrante".
Según su perfil de LinkedIn, Cross trabaja como médico residente especializada en obstetricia y ginecología en el University of Texas Health Science Center de Houston.
La web de la escuela de medicina indica que es médico residente de cuarto año.
Y, sin embargo, cada vez que intentaba informar a las azafatas que era médico solo encontraba respuestas condescendientes.
Así lo explica ella:
"Me la quedo mirando mientras pulso el botón.
Y me dice, 'oh vaya,¿eres médico de verdad?' Le contesto que si. Me dice 'déjame ver tus credenciales.
¿Qué tipo de médico eres?
¿Dónde trabajas?
¿Por qué estabas en Detroit?' (El hombre seguía necesitando ayuda mientras ella bloqueaba mi fila para que no me levantara mientras me bombardeaba con preguntas).
Le respondí 'OBGYN, trabajo en Houston, estaba en Detroit por una boda, pero lo creas o no tienen médicos en Detroit. Ahora discúlpame para que pueda ayudar a este hombre necesitado".
Según Cross, en ese momento un hombre blanco se acercó y dijo que también era médico. La azafata mandó a Cross de vuelta a su asiento, diciendo que el hombre tenía sus credenciales. Más tarde regresó para preguntarle cómo tratar la presión baja del pasajero.
Éste acabó recobrando la consciencia.
Su post de Facebook desencadenó 12.000 comentarios y también incendió Twitter. Muchos usuarios utilizaron el hashttag #TamikaCross #WeDoExist y #WhatADoctorLooksLike para que aquella injusticia fuese vista por personas negras del sector sanitario.
Y funcionó. Su post recibió varias muestras de apoyo de médicos de distintos países. De este modo, se dejó entender que la que estuvo fuera de lugar fue aquella azafata, y no ella.
Por su parte, la compañía se defendió alegando que aquella actitud "no refleja la cultura de Delta. Condenamos la discriminación a nuestros clientes". Sin embargo, aquella respuesta llegaba tarde.
El daño ya estaba hecho.