Desde 1968, el 8 de Septiembre, en honor a Julius Fucik se conmemora ese día como el "Día Internacional del Periodista".
Julius Fucik fue uno de esos héroes que lucharon contra los nazis. Periodista y escritor checo, nació el 23 de enero de 1903 ciudad de Praga, región de Chequia, Bandera del Imperio Austro-Húngaro Imperio Austro-Húngaro
Estudió filosofía en la Universidad de Praga.
En 1921 ingresó en el Partido Comunista y por esas mismas fechas se inició como crítico literario y teatral.
Fue redactor de las publicaciones comunistas Rude Pravo y Tvorba.
Desde principio de la ocupación nazi, siguió su actividad.
En febrero de 1941 pasó a ser miembro del Comité Central del Partido Comunista en la clandestinidad, encargándose de las publicaciones ilegales del partido.
En abril del 1942 Julius Fucik fue arrestado y torturado por la Gestapo.
En la cárcel de Panktac, escribió "Reportaje al pie de la horca".
En el verano del 1943 fue enviado a Alemania y asesinado en la cárcel Plötzensee de Berlín.
"Reportaje al pie de la horca", sacado hoja por hoja de la cárcel, se publicó por primera vez en 1945, al terminar la Segunda Guerra Mundial, y más tarde fue traducido a 70 idiomas de todo el mundo.
Es el testimonio de que ni las torturas, ni los chantajes de los nazis consiguieron doblegar a Julius Fuchik y a otros héroes del comunismo.
Su valentía, su heroísmo, sentir fuertemente que cumplía su deber, tener ideas claras y fé en la victoria, era la fuerza que levantó a los pueblos en la lucha contra el fascismo y logró la libertad.
Fucik murió físicamente, pero su espíritu está vivo.
Su valór y su patriotismo nos tienen que servir a los demás, a los pueblos que luchan por la libertad, por la paz de sus familias, sus seres queridos, su tierra, por el amor a la vida.
Por este libro Fucik fue galardonado en 1950, a título póstumo, con el Premio Internacional de la Paz.
Fue un 8 de Septiembre de 1943 cuando fue ejecutado en Berlín, Alemania el periodista Checo de origen Judío Julius Fucik.
El fue redactor de Rudé Právo y de Tvorba de Checoslovatia y fue apresado y condenado por un tribunal nazi en Berlín.
Durante su cautiverio en campos de concentración, específicamente en la cárcel de Pankrác, escribió clandestinamente con su sangre el libro "Reportaje al pie de la Horca".
Este fue recogido y recopilado por su esposa Agustina tras la derrota de la Alemania Hitleriana en 1945.
En este reportaje que reúne las técnicas de éste género periodístico, describe y relata las espeluznantes torturas que él recibió y recibieron miles de ciudadanos que estaban en contra de las atrocidades de Hitler en Europa.
Julius Fucik denuncia en este reportaje todas los crímenes de Lesa humanidad y torturas dentro de los campos de concentración donde la Gestapo ejecutaba por órdenes del gran Fuhrer.
El heroísmo, la valentía de este gran periodista es de manifiesto que a pesar de las torturas inimaginables para la mente humana nunca delató, ni dio una sola pista de los luchadores de la época como se manifiesta en este párrafo manuscrito de su reportaje:
-¿Quiénes son los miembros del Comité Central? ¿Dónde están las radioemisoras? ¿Dónde se encuentran vuestras imprentas? ¡Habla! ¡Habla! ¡Habla! Ahora ya puedo contar con más tranquilidad los golpes. El único dolor que siento es de los labios, mordidos por mis dientes.
-Descalzadle
Es verdad, las plantas de los pies no han perdido aún la sensibilidad, lo siento, cinco, seis siete...y ahora parece como si los golpes me penetraban en el cerebro.
Son las dos Praga duerme y quizás en alguno de sus lechos un niño solloza entre sueños y un hombre acaricia la cadera de su mujer.
-¡Habla!, Habla!
Paso la lengua sobre mis encías e intento contar los dientes rotos. No lo consigo. ¿Doce, quince, diecisiete? No. Ese es el número de los comisarios que "me interrogan" ahora. Algunos están visiblemente fatigados. Y la muerte tarda en venir".
"...No, no temáis. No hablaré. Confiad en mí. Después de todo, mi fin ya no puede estar lejano. Esto ahora es solo un sueño, una pesadilla febril: los golpes llueven, los esbirros me refrescan con agua.
Y nuevos golpes. Y otra vez: ¡Habla! ¡Habla! ¡Habla! Pero aún no consigo morir.
Madre, padre: ¿Por qué me habéis hecho tan fuerte?
Y realmente este periodista checo era tan fuerte en convicciones, principios que las organizaciones internacionales de periodistas declararon el Día de su ejecución el 8 de Septiembre como el día de los hombres y mujeres de prensa en el mundo.
Hombres y mujeres que diariamente luchan y se enfrentan a todo tipo de dilemas éticos porque si ayer lucharon en Nicaragua contra Somoza un Manuel Díaz y Sotelo que sufrió cárceles y torturas, hoy tenemos periodistas que son eliminados por su lucha contra el narcotráfico, como los colegas colombianos lucha igual o más feroz que enfrentarse a dictaduras militares.
También los periodistas luchan contra mil formas de corrupción: El soborno, la extorsión, el rechazo a los halagos, la integridad en general, tan difícil mantenerla para muchos, pues los periodistas enfrentan el desempleo, sub empleo o bajos salarios que no permiten vivir dignamente y el periodista debe ser fuerte y valiente como Julius Fucik de rechazar esos "Cantos de Sirena" que pueden beneficiarte temporalmente al resolverte económicamente algún problema, pero que te aniquila a largo plazo al irse perdiendo en ese periodista la credibilidad de los que te rodean, de sus lectores a quien se debe.
Ese periodista va perdiendo principios y olvidándose de su responsabilidad social a través de los medios de comunicación.
Es por eso que el periodista debe a toda costa mantener como valores el amor, la verdad, la justicia, respeto, tolerancia y libertad.
En esa misma medida que practiquemos estos valores en la misma medida seremos más creibles más respetados y por ende más exitosos en nuestro ejercicio periodístico.
http://www.taringa.net/posts/info/1366367/Porque-el-dia-del-periodista-Julius-Fucik.html