«Desde el punto de vista filosófico, la actual trotskismo, al igual que la del pasado, se caracteriza por ser voluntarista, por un subjetivismo que se manifiesta, entre otras cosas, en el hecho de no tener en cuenta las condiciones objetivas que determinan el desarrollo del movimiento revolucionario en el ámbito nacional y a escala internacional, por no tener en cuenta las fuerzas de carácter y motrices de la revolución en sus diferentes etapas.
Los conceptos trotskistas también se caracterizan por el eclecticismo y el pragmatismo, la falta de principio estables, la confianza en conceptos totalmente opuestos, el paso de un extremo a otro, uniéndose con las más diversas tendencias en aras de una ventaja efímera, etc.
Desde el punto de vista ideo-político, hoy en día el trotskismo se caracteriza, sobre todo, por la hostilidad hacia marxismo-leninismo revolucionario.
Esta es una característica general de viejo y nuevo trotskismo.
Hubo un tiempo en que esto se expresaba en la posición trotskista hostil hacia Lenin y el leninismo.
Más tarde se encontró su expresión en las posiciones hostiles de Trotsky y los trotskistas hacia Stalin, sus ideas, trabajo y liderazgo.
En nuestro tiempo la hostilidad del trotskismo hacia el marxismo-leninismo se expresa en el hecho de que los trotskistas tratan de desviar la atención del movimiento revolucionario de lucha contra el revisionismo moderno y lo empujan hacia posiciones antistalinistas». (Agim Popa;
El movimiento revolucionario actual y el trotskismo, 1972)
http://bitacoramarxistaleninista.blogspot.com.es/2016/06/lo-que-caracteriza-al-trotskismo-en.html