El presidente interino de Brasil, Michel Temer,ordenó instalar un cordón militar alrededor de la zona del palacio da Alvorada, lugar de residencia de la mandataria Dilma Rousseff.
Así lo comunican medios brasileños citando al vicepresidente del Senado Jorge Vianna.
El legislador asegura que se instaló un punto de control en las inmediaciones, de manera que todos los que visiten a la presidenta suspendida deben identificarse ante una patrulla militar fuertemente armada, recoge Nossapolitica.net.
El vicepresidente del Senado afirma que al visitar a Rousseff tuvo que esperar un largo rato antes de poder acceder a su residencia.
En apoyo a la presidenta suspendida, el exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva busca crear un frente político de fuerzas de izquierda.
El líder del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra Joao Pedro Stédile, comenta que “tal frente de hecho ya existe”, y opina que la “tarea ahora es frenar el golpe y hacer que Rousseff vuelva al poder”.