En las elecciones de Estados Unidos en ocasiones se divulgan sorprendentes verdades. Recuerdo cuando a John Kerry sus propios hombres de entonces lo desenmascararon como un asesino en las aldeas situadas al orilla del río Mekong.
Ahora hay una ofensiva contra el judío Henry Kissinger que durante tantas décadas ha llenado el escenario político internacional de incontables crímenes para el récord, ya bastante sórdido y sucio, de su país de adopción.
Fue el autor intelectual de los más horrendos crímenes de la guerra de Vietnam y se le culpa de demorarse en detener el genocidio, muchos dicen que disfruta con la muerte. Otros dicen que lo hacía como una cortina de humo mediática para tapar los crímenes que cometía el estado sionista en el Medio Oriente, su verdadera patria.
Fue el hombre que, con sadismo ejemplar, orientó el golpe de estado de Pinochet en Chile y aunque no existen informes de sus órdenes se cree que fueron las que desataron la masacre entre la población. También tiene en su tenebroso récord el golpe militar en Argentina donde sí se sabe que orientó a los generales golpistas "maten todos los que tengan que matar, pero rápido"
Fue el organizador del Plan Cóndor que cubrió de llanto y luto toda América Latina con los famosos vuelos de la muerte que ya se habían ensayado en Vietnam.
Es curioso que con una conducta publica tan horrenda, Henry Kissinger fuera ganador nada menos que de un Nobel de la Paz, desde esa perspectiva si la historia hubiera sido otra, los líderes de la Alemania Nazis habrían sido también premiados. Él los igualaba.
Kissinger nació en Alemania y estaba destinado a ser un criminal de guerra de ese país al servicio de los hitlerianos, pero su condición de judío malogró su destino, que después recupero con creces al servicio de su patria adoptiva.
Para muchos es el típico apátrida que se destaca en la sucia política estadounidense a la que muchos de los nacidos en el país eluden, pero que para quien se siente atraído por el dinero vinculado al crimen, se convierte en una gran fuente de riqueza.
De todas formas lo de las elecciones es solo folklore, eso la gente lo analiza con todo el pragmatismo yanqui y dicen " será un gran hijo de puta pero es nuestro hijo de puta."
Antonio González
Publicado por JM Álvarez
