Don Luis Alberto Eva, un próspero empresario que fue dueño del valle de Ticomo, le entregó todos sus ahorros, unos $850,000 dólares, al financista Álvaro Montealegre Rivas con la esperanza de que hiciera rendir los ahorros de su vida y la promesa de un interés de 7% anual.
Don Alberto lloró este viernes, como un niño, relatando a la Fiscal Grethel Fernández, la tragedia en que vive desde el año 2013 cuando Montealegre Rivas no le devolvió lo invertido. "Qué más quiere de mi Álvaro Montealegre", agregó entre sollozos.
Este caso es el más dramático de las víctimas de Montealegre, y sus asociados Hugo Paguaga Baca y Roberto Bendaña McEwan. El abogado Francisco Mendieta, quien representa a cinco de las víctimas, dijo que la situación de sus representados es grave.
El juicio contra Montealegre y los otros dos acusados fue abierto en los juzgados de Managua el cinco de septiembre del 2013 y 21 meses después sigue sin ser convocada la audiencia oral y pública.
Otra de las víctimas agregó que "se les devolvió el dinero a las monjitas y se olvidaron de nosotros".
Reclaman las tácticas de los acusadores
La Fiscal Grethel Fernández reclamó a los abogados de las víctimas de Álvaro Montealegre que sus tácticas han atrasado un juicio que acumula 25 meses sin el proceso oral y público.
Recordó que en diciembre del año pasado, los abogados de las víctimas pidieron tiempo para iniciar el trámite de mediación con Montealegre Rivas "y específicamente los acusadores propusieron que se podría haber llegado a acuerdo satisfactorio".
La licenciada Fernández dijo a los abogados que "ustedes mejor que yo están conscientes de que se reunieron en más de 10 ocasiones y no se llegó a arreglo. ¿Qué hicieron los abogados? Le pidieron al juez reprogramación y más reprogramación".
La fiscal agregó que el juez, Octavio Rotshchuh, "dio lugar a la reprogramación sin interrumpir el proceso, dio lugar a las peticiones de la defensa para suspender por un posible trámite de mediación".
Pero, al final, Montealegre Rivas pagó medio millón de dólares a las monjitas y exigió que el caso fuera enviado a la vía civil para "negociar" por separado con sus víctimas.
La Trinchera S.A.
