(PL) Por vigesimocuarta ocasión consecutiva, la Asamblea General de la ONU demandó de manera contundente el fin del bloqueo contra Cuba, foro que este martes dejó a Estados Unidos más aislado que nunca en la aplicación del unilateral cerco.
La plenaria de los 193 miembros de Naciones Unidas vio a 191 de ellos pulsar el botón verde, para respaldar con su voto una nueva resolución sobre la necesidad de levantar el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Washington a la isla durante más de medio siglo.
En los últimos tres años, 188 países habían apoyado la iniciativa, que solo recibió aquí el rechazo de Estados Unidos y su aliado Israel.
Si categórica fue la votación, con cifra récord de partidarios del texto, también lo fueron las intervenciones de diplomáticos de los cinco continentes, quienes a nombre de organizaciones globales y regionales, así como en su capacidad nacional, demandaron el fin de las medidas implementadas y recrudecidas por 10 presidentes norteamericanos.
La continuación del bloqueo resulta injustificable, por sus afectaciones en todos los sectores de la sociedad cubana y su impacto en la población civil, además de violar el Derecho Internacional y la Carta de la ONU, advirtió el embajador iraní, G. Khoshroo, en representación del Movimiento de Países No Alineados, que integra a 120 estados.
Por su parte, el embajador sudafricano Kingsley Mamabolo señaló a nombre del Grupo de los 77 más China, que reúne a 134 de los 193 miembros de Naciones Unidas, que el cerco constituye el más injusto, severo y prolongado sistema de sanciones unilaterales jamás aplicado.
"No levantarlo causaría que la historia juzgue nuevamente a quienes siguen perpetuando esta medida", afirmó.
También la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, la Unión Africana, la Comunidad del Caribe, la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, el Mercado Común del Sur y la Organización para la Cooperación Islámica reclamaron el cese del bloqueo.
La votación tuvo lugar en un escenario inédito, luego del restablecimiento en julio pasado de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos y la reapertura de sus embajadas.
Los oradores reconocieron estos pasos y estimularon el acercamiento bilateral, pero en general dejaron clara la importancia de acelerarlo mediante la eliminación del bloqueo, cuyo anacronismo e inutilidad han sido reconocidos por el propio presidente norteamericano, Barack Obama, quien llama al Congreso a discutir su fin.
POSTURA DE CUBA
El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, denunció ante la Asamblea General la vigencia del cerco, pese a los avances en el sector diplomático entre ambos países.
"No debemos confundir la realidad con los deseos ni las expresiones de buena voluntad (â��). Y los hechos demuestran, con toda claridad, que el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto contra Cuba está en plena y completa aplicación", sentenció.
Rodríguez puso recientes ejemplos de la implementación de las sanciones y su proyección extraterritorial, como las multas impuestas a entidades fundamentalmente europeas.
Además, citó la retención del primer pago de la compañía norteamericana Sprint para iniciar las llamadas telefónicas directas entre ambos países y los obstáculos a transacciones financieras que soportan los vuelos chárter, los únicos que operan.
Sin embargo, ratificó en declaraciones a Prensa Latina durante un encuentro con periodistas, después de la votación, la voluntad de la isla de avanzar hacia mejores vínculos con el vecino norteño.
El canciller de la mayor de las Antillas insistió en la postura cubana de progresar sobre la base del absoluto respeto a la soberanía y la independencia nacionales.
También el representante estadounidense en la plenaria, Ronald Godard, expresó que Washington está comprometido con el acercamiento bilateral.
En su explicación del voto, el diplomático argumentó que la resolución no recogía el nuevo escenario de las relaciones entre ambos estados, y "era casi idéntica a las anteriores".
Al respecto, Rodríguez aclaró que sin pretender replicar el discurso de Godard, era importante reiterar los cambios introducidos a la iniciativa, como el reconocimiento a los progresos y a la decisión de Obama de trabajar con el Congreso para levantar el bloqueo.
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