El presidente venezolano, Nicolás Maduro, señala que se ha capturado a todas las personas implicadas en el asesinato del diputado Robert Serra, salvo al expresidente colombiano Álvaro Uribe.
"Sólo nos falta uno, hacerle el juicio y capturarlo y algún día habrá justicia, y ese es Álvaro Uribe Vélez (presidente colombiano entre 2002 y 2010), quien dio la orden para asesinarlo; con la verdad ni ofendo ni temo, esa es la verdad", declaró Maduro en un acto de homenaje celebrado el jueves para conmemorar el primer aniversario del asesinato de Serra, antiguo diputado en la Asamblea Nacional (AN) por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Sólo nos falta uno, hacerle el juicio y capturarlo y algún día habrá justicia, y ese es Álvaro Uribe Vélez, quien dio la orden para asesinarlo; con la verdad ni ofendo ni temo, esa es la verdad", ha declarado el presidente venezolano, Nicolás Maduro.
En el acto, celebrado en la Casa de la Juventud Robert Serra, ubicada en la parroquia La Pastora de la capital venezolana, Caracas, el jefe de Estado bolivariano identificó a Uribe como autor intelectual del homicidio, tal y comovenía señalando desde el principio de la investigación, que determinó a Leiver Padilla Mendoza como autor material del hecho.
Mendoza, que recibía el apodo de "el Colombia", fungía como líder de la banda paramilitar que asesinó al diputado revolucionario y a su compañera, María Herrera.
Maduro agregó que las pistas, las grabaciones y los vídeos que dejó Serra ayudaron a la Policía a localizar a los autores materiales e intelectuales de su propio asesinato.
Tras recordar que Serra tenía solo 27 años al morir, el mandatario venezolano destacó el papel de la juventud en el combate contra la corrupción promovida por algunos sectores del país, y calificó a la juventud actual como “generación de esperanza”.
Asimismo, hizo un llamado a mantener vivo el recuerdo de todas las personas que participaron con su lucha en el impulso y desarrollo de la Revolución Bolivariana, como el comandante Hugo Chávez, el joven mártir Serra y el presidente del Concejo del municipio Libertado Eliézer Otaiza, asesinado en abril de 2014 a manos de ultraderechistas venezolanos, apoyados por el imperio.
El presidente venezolano reiteró su condena a esos homicidios y advirtió de que ese tipo de actos violentos buscan sembrar el odio y la venganza en el país para sumirlo en el caos.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ofrece un discurso en la Casa de la Juventud Robert Serra, ubicada en la parroquia La Pastora de la capital venezolana, Caracas, 1 de octubre de 2015.
El pasado 2 de junio, Maduro culpó al brazo derecho del expresidente colombiano del asesinato de Serra y resaltó que el exconcejal de la ciudad colombiana de Cúcuta (este), Julio Vélez, financió y gestionó todo el proceso. Dos días antes, Maduro aseguró que tanto quienes ordenaron como quienes ejecutaron el crimen tendrán que comparecer ante la justicia.
Cabe recordar que ayer jueves, los venezolanos se movilizaron en las calles de la capital para conmemorar el primer aniversario del asesinato de Serra.
Jóvenes miembros del Voluntariado Antiimperialista Robert Serra, de la Organización Bolivariana Estudiantil (OBE), estudiantes de la Federación Venezolana de Estudiantes de Educación Media y organizaciones revolucionarias juveniles participaron en la marcha, que culminó en la Asamblea Nacional, donde se llevó a cabo una sesión especial en honor a Serra.
Los venezolanos marchan para conmemorar el primer aniversario del asesinato de diputado Robert Serra en Caracas, capital de Venezuela. 1 de octubre de 2015.
El parlamentario fue asesinado en la noche del 1 octubre de 2014, de 36 puñaladas en su residencia, en Caracas. Su asesino fue capturado en Colombia y extraditado a Venezuela, otras 10 personas han sido también capturadas en relación con el caso.
Para las autoridades venezolanas, el asesinato selectivo de dirigentes nacionales forma parte de planes terroristas con apoyo externo para socavar la estabilidad del país.
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