Dmitry Minin / Fondo de la Cultura Estratégica
Traducido para el CEPRID por María Valdés
Si alguien pidiera a quienes se unieron al Maidán hace un año que le explicase las razones por qué lo hicieron, probablemente le dirían que era por la corrupción rampante en Ucrania.
Las protestas ya pertenecen al pasado, el gobierno ha cambiado y la corrupción ahora es tan extensa que lo abarca todo.
La corrupción en Ucrania es un fenómeno único e incomparable en el mundo.
El viejo sistema de corrupción jerárquico tenía sus propias reglas y limitaciones. Ahora la corrupción no tiene límites en su desbocada carrera.
Es imposible saber quién se embolsa qué, en qué cantidades y por qué. Todos lo hacen y gratis.
La modernización de la corrupción es la única cosa que el nuevo gobierno ha modernizado.
Nadie se ha preocupado de filmar las mansiones de lujo de los nuevos gobernantes que hacen palidecer a la Mezhyhirya, la residencia privada del ex presidente Yanukovich –el símbolo de la corrupción en las altas esferas ucranianas-, mansión a la que se ha prestado mucha atención durante mucho tiempo hasta hacer que la gente se ría de tanta historia.
En realidad no era nada especial, solo una casa de campo grande, de estilo vulgar.
En su artículo “Bienvenido a Ucrania, el país más corrupto de Europa”, The Guardian informa que según el índice de percepción de corrupción de Transparencia Internacional –el indicador de corrupción mundial más consultado- Ucrania se sitúa en el puesto 142 del mundo, junto a Uganda.
El el último informe Ucrania cayó detrás de Nigeria, por encima sólo de algunas tribus.
El artículo dice que desde el año 1991 los funcionarios del gobierno, parlamentarios y hombres de negocios han creado esquemas complejos y altamente lucrativos para saquear el presupuesto del Estado.
El robo ha paralizado Ucrania. La economía era tan grande como la de Polonia cuando la independencia, ahora es solo un tercio de la polaca. Los ucranianos comunes y corrientes han visto su nivel de vida estancarse, mientras que un puñado de oligarcas se ha convertido en multimillonarios.
El diputado de la Rada Sergei Kaplin, miembro de la coalición de Poroshenko, dice que en realidad todos los ministerios tienen recolectores de sobornos. El 80% de los esquemas puestos en práctica durante el viejo régimen siguen vigentes. Los resquicios para la evasión tributaria se siguen utilizando, como las transferencias cobradas en efectivo. Pero también hay nuevos esquemas, porque se ha vuelto imposible rastrear el flujo de dinero. Según Kaplin, el nivel de corrupción de Yatseniuk ha dejado muy atrás al gabinete Azarov.
Pese a lo trágica que es, la guerra en curso ofrece grandes oportunidades para el lavado de dinero. Informes del gobierno dicen que sistemas de armamentos y equipos están siendo enviados a las zonas en guerra en grandes cantidades, en circunstancias que el personal militar se queja. Dicen que les falta de todo. Es fácil adivinar por qué. Sobre el papel todo ha sido enviado al frente, pero en realidad los suministros son vendidos a aquellos que ofrecen un mejor precio.
Muchas veces se ha informado que los intermediarios sacan equipos de los almacenes para venderlos a un precio que excede tres veces el precio real. Por ejemplo, las empresas estatales Ukrspetsexport y Ukrinmash querían que la industria de la defensa pagara sobornos y un 10% más de comisión para cubrir “servicios de consultoría”, etc.
Ahora la posibilidad de aumentar la fuerza militar hasta 250.000 hombres está siendo discutida a alto nivel.
¡Se podría adivinar cuánto dinero se van a ser embolsar! Ukroboronprom es un conglomerado de propiedad estatal (alrededor de 130 empresas de ingeniería y defensa) que se especializa en el desarrollo, producción y ejecución de productos armamentísticos. Este conglomerado está a cargo del complejo militar industrial del país y obtiene beneficios de la “cosecha roja” de la guerra. Su actual presidente, Roman Romanov es solo una figura decorativa.
Oleg Svinarchuk, dueño de la Bogdan Corporation, que participa en una amplia gama de negocios, es el dueño en la sombra de todo el conglomerado. Él es el que toma las decisiones. Svinarchuk es el vínculo que conecta al complejo militar industrial con el presidente Poroshenko, su amigo personal y ex socio a quien ha hecho accionista mayoritario de la Bogdan Corporation.
A consecuencia de una investigación fiscal por sorpresa de las 17 empresas de propiedad de Ukroboronprom realizada por la fiscalía general a mediados del año pasado, se descubrió que faltaban 189 transportes blindados de personal y 440 sistemas de artillería antiaérea, entre otro material que faltaba. Nadie fue imputado.
Una delegación ucraniana encabezada por Petro Poroshenko (¿cuidando sus intereses privados?) llamó bastante la atención mientras visitaba recientemente la exposición de armamento de Abu Dhabi.
El presidente declaró que presuntamente había logrado algunos acuerdos sobre armamentos con el objeto de mejorar la capacidad de las fuerzas que participan en la “operación antiterrorista”. Los árabes se sorprendieron al escucharlo. Acto seguido negaron la información.
Hasta ahora ellos han sido importadores de armas, no exportadores. Sería lógico sería suponer que no se trataba de adquisiciones lo que discutió el equipo ucraniano, sino más bien venta de armas en el exterior, ya que la “operación antiterrorista” hizo que algunos sistemas pasaran a ser excedentarios. De lo contrario, ¿qué fue lo que hizo que el presidente ucraniano, hombre con una agenda tan ocupada, viajase hasta el Golfo Pérsico?
Otra de las hazañas de Ukroboronprom fue la adquisición de un número considerable de transportes de personal Saxon fabricados en Gran Bretaña, allá por la década de 1960. Los vehículos no son aptos para la lucha en terreno abierto. Los expertos creen que pasará mucho tiempo antes que los Saxon lleguen a las zonas de combate ya que habrá todavía que invertir más dinero para reacondicionarlos.
Altos funcionarios de Ukroboronprom están involucrados en el proceso. Andrey Ivanchuk que representa a la industria de las bebidas alcohólicas y Nikolay Martinenko que está en el sector industrial energético y de combustibles, son estrechos contactos del Primer Ministro, Arseniy Yatsenyuk. El primer ministro ordenó la privatización de la estratégica empresa estadal Ukrspirit y nombró como dueño a Andrey Ivanchuk. Esta decisión podría afectar el ingreso de impuestos al gobierno. Nikolay Martinenko se halla en su cuarto período como presidente del Comité de Energía y Combustibles, Política y Seguridad Nuclear.
Las cosas que él hace junto con el primer ministro podrían producir grandes pérdidas financieras y un gran desastre nuclear. A fines del mes de enero, Energoatom, la empresa que hasta cierto punto opera en Ucrania bajo el control de Martinenko y la Holtec International, firmaron un contrato por 300 millones de dólares como enmienda del contrato para la construcción de un Depósito Central de Almacenamiento de Combustible (CSFSF) en la Planta Eléctrica de Energía Nuclear de Chernobyl y para el suministro de un sistema de almacenamiento en seco de combustible nuclear agotado.
Los detalles del contrato se mantienen en secreto. El equipo será entregado a fines del año 2020 y la etapa principal del desarrollo pautada para el período 2015-2017. Durante este período, el diseño y la construcción de la instalación de almacenamiento serán terminadas.
El equipamiento y la tecnología de Holtec serán instalados y el CSFSF entrará en servicio. Algunos periodistas sostienen que el precio es tres veces su valor real. Para Ucrania se trata de un acuerdo que la somete y sin garantías de seguridad.
Según estimaciones de algunos expertos, la implementación del contrato provocará el alza de los precios del servicio a los consumidores finales bajo el disfraz de cumplir con las condiciones impuestas por el Fondo Monetario Internacional, organismo que considera que es necesario llevar los precios del servicio a nivel del mercado. El destino final del contrato multimillonario con Sudáfrica para el suministro de carbón quedó colgando en el aire.
Hay un gran número de casos que demuestran que en Ucrania existe de hecho una despiadada y desenfrenada corrupción. Las muertes de Valentina Semenyuk y Mijail Chechetov del Fondo de Propiedad Estadal son un buen ejemplo. Ambos sabían mucho acerca de los esquemas de malversación de fondos del estado practicados por altos funcionarios públicos y magnates ucranianos.
Los extranjeros, especialmente los que provienen de Georgia y de los estados bálticos son preferidos cuando se trata de asignar cargos de responsabilidad en el gobierno con relación a cuestiones de propiedad. Algunos de ellos enfrentan cargos de corrupción en sus países de origen, Mijail Saskashvili está acusado de cometer abusos financieros en Georgia. Actualmente, él es candidato a presidir la oficina anticorrupción en Ucrania.
Al mismo tiempo, Saakashvili hace lobby en Estados Unidos y otros países a favor del envío de armas hacia Ucrania. En todo caso, ¿qué podrían hacer los extranjeros en el gabinete de Yatsenyuk cuando las leyes comunes del desarrollo económico no guardan ninguna relación con la economía de Ucrania?
El timón de la economía está bajo control manual y deberíamos estar familiarizados con todas las características de los negocios turbios. Todo lo que estos extranjeros pueden hacer es contribuir a una más prolija extracción de lo que queda de la riqueza nacional de Ucrania.
https://dedona.wordpress.com/2015/04/07/ucrania-un-pais-regido-por-el-regimen-mas-corrupto-del-mundo-dmitry-minin/