Pablo Gonzalez

Medicamento cubano evita las amputaciones por pie diabético


Y ya está en Argentina.

El fármaco cubano Heberprot-P, elaborado por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) y el Instituto de Angiología y Cirugía Vascular y destinado a tratar la úlcera del pie diabético, ha sido aplicado en más de 18.000 pacientes en Venezuela y Cuba mostrando resultados satisfactorios.
Según el doctor José Ignacio Fernández Montequín, médico y científico del Instituto de Angiología y Cirugía Vascular, el medicamento fue registrado en la isla caribeña en 2006 y desde aquel entonces ha demostrado su eficacia en los ensayos clínicos.

Heberprot-P estimula la formación del tejido, lo que conlleva la cicatrización de las úlceras, permitiendo así evitar la amputación de las extremidades inferiores en la mayoría de los casos. 

Según las estimaciones de diferentes organismos internacionales, actualmente alrededor de 350 millones de personas en todo el mundo padecen diabetes y se espera que su número ascienda a 450 millones para el año 2025.

 Según el especialista, del 15% al 35% de estos enfermos padecerán úlceras del pie diabético en algún momento de su vida.

El medicamento, que tiene 17 patentes, se emplea en 13 países actualmente y el interés de comprarlo existe en diferentes naciones europeas, como por ejemplo en España, donde se planea su aplicación en 18 centros médicos.

Miriela Gil Mena, coordinadora del Programa de Extensión Nacional del Heberprot-P, señala que la elaboración del fármaco ha sido uno de los más relevantes avances de la biotecnología cubana de los últimos años.


Innovador medicamento para el pie diabético


Llega a la Argentina un innovador medicamento que permite cerrar rápidamente las heridas y reducir las amputaciones. Es para el tratamiento de úlceras profundas y complejas producidas por pie diabético, que demostró una alta efectividad en la recuperación de pacientes que, hasta el momento, no tenían muchas opciones de tratamiento disponibles más allá de la amputación.

Se estima que entre un 15 y un 25 por ciento de los pacientes con diabetes desarrollarán úlceras en algún momento de su vida; de ellos, entre un 10 y un 30 por ciento sufrirá además una amputación. Según estadísticas de la Federación Internacional de Diabetes, como consecuencia de la progresión de estas heridas, cada 30 segundos se produce una amputación a causa de la diabetes en el mundo.

Nuevo medicamento

El medicamento fue desarrollado y es producido por científicos cubanos del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de La Habana (CIGB); y será comercializado en el país por el laboratorio nacional ELEA bajo el nombre de Heberprot-p. 

Este nuevo medicamento inyectable, basado en el Factor de Crecimiento Epidérmico (FCE), permite resolver el problema de la insuficiente cicatrización del diabético. “Este producto estimula la formación de tejido de granulación útil, así como la llamada angiogénesis que implica la formación de nuevos vasos sanguíneos. 

Esto permite promover el rápido cierre de la lesión en pacientes diabéticos, que por su misma enfermedad, tienen dificultad para cicatrizar sus heridas y evitar de esta forma la amputación en un alto porcentaje de los pacientes con lesiones profundas que, en muchos casos, eran resistentes al tratamiento convencional” afirmó el doctor José Fernández Montequín, médico especialista en Angiología y Cirugía vascular; asesor del CIGB y Profesor de la Universidad Médica de Cuba.

El medicamento es un novedoso tratamiento, único en su clase: una nueva opción terapéutica para el tratamiento de estas lesiones, ayudando a acelerar la cicatrización de úlceras profundas y complejas derivadas de la diabetes.

Si bien en los últimos años se han desarrollado innumerables herramientas para tratar de manera rápida y selectiva cualquier herida, y mejorar las posibilidades de recuperación y fundamentalmente evitar las amputaciones; un gran número de pacientes ya sea por el tamaño de la lesión o por la falta de cuidado o diagnóstico correcto deben someterse a una amputación.

“Toda lesión, sobre todo en el paciente con pie diabético, demora mucho tiempo en cicatrizar por lo que es mayor la posibilidad de infección y por lo tanto mayor también la probabilidad de amputaciones. Es por esto que, por lo que hemos podido observar, el mayor beneficio de este nuevo producto es la aceleración en el proceso de cicatrización de heridas. 

El hecho de cerrar mas rápidamente ese tejido y de cubrir esa primera barrera de protección que es la piel en un momento en donde urge el proceso de cicatrización, fundamentalmente en lesiones muy extensas o muy profundas, disminuye el riesgo de infección y por consiguiente el riesgo de amputación.” afirmó la doctora Marta Calvagno , miembro del Servicio de nutrición del Hospital Tornú.

Por su parte, para el doctor José Daniel Braver , coordinador de la Clínica de Pie Diabético y médico del servicio de Cirugía Vascular del Hospital del Clínicas y de FLENI, se trata de una nueva innovación hacia una nueva terapéutica que son los factores de crecimiento. “En mi opinión debido a su fácil aplicación, este producto viene a reemplazar a muchos otros anteriores: la eficacia es muy rápida y el paciente no necesita internarse. Aparentemente este producto podría crear nuevos vasos y así evitar la amputación en pacientes que no tienen otra salida terapéutica” aseguró.

Efectividad demostrada

El nuevo medicamento ha demostrado su seguridad y eficacia a partir de diferentes estudios clínicos controlados. “La literatura registra que el 60 por ciento de los pacientes con pie diabético pueden sufrir una amputación mayor. 

En las diferentes series de estudios realizados, con la aplicación de Heberprot-p la cifra se invierte a un 85 por ciento de salvación de extremidades y sólo un 15% de amputaciones mayores en pacientes portadores de severas isquemias” afirmó el doctor Montequín, quien participó de estudios clínicos realizados con el producto y visitó especialmente la Argentina para la presentación del nuevo medicamentos.

En un último estudio realizado en pacientes con lesiones avanzadas y sin opción de tratamiento disponible salvo la amputación, se logró el cierre total de la herida (un 100% de generación de tejido de granulación) en el 86,8 % de los pacientes (95.80% neuropáticos y 79.30% isquémicos), observándose a las 2 semanas ya un 50% del cierre de la lesión en el 83% de los pacientes (95.80% neuropáticos y 72.40% isquémicos). 

El área promedio de la lesión superaba los 25 cm2 (clasificados según la escala de Wagner como grados 3 o 4), y eran predominantemente pacientes isquémicos lo que hacía más difícil la cicatrización de la úlcera. “En mi experiencia personal con la utilización del producto, la satisfacción de los pacientes es muy significativa.

 Rápidamente pueden observarse resultados; a partir de la sexta aplicación ya se empieza a ver la granulación del tejido y el cierre parcial o total de la herida puedo observarse a las 6 u 8 semanas. 

Se obtienen resultados cercanos al 100 por ciento de cierre de la lesión en úlceras de grados del 1 al 4 de la escala de Wagner. Y después de un adecuado debridamiento, también se obtienen respuestas en un 60 por ciento de los pacientes con úlceras extremadamente severas, de grado 5, donde en el 100 por ciento de los casos la única opción de tratamiento era la amputación”, aseguró el especialista cubano.

Úlceras neuropáticas y úlceras isquémicas

La falta de control de los niveles elevados de azúcar en sangre característicos de la diabetes, produce un daño progresivo de los nervios y de los vasos sanguíneos de las piernas generando por un lado, lo que se denomina neuropatía diabética o una falta de sensibilidad en los miembros inferiores que favorece la aparición de lesiones; y por el otro lo que se conoce como enfermedad vascular periférica o pie isquémico.

“Cuando hay una neuropatía diabética el paciente se lastima y no se da cuenta; y hay una pérdida de sensibilidad frente al dolor, al calor o al frío.

 Por lo tanto un simple corte o raspadura, heridas por contacto con temperaturas elevadas, la utilización de un calzado inapropiado o callos plantares no tratados son situaciones que por la falta de sensibilidad pasan inadvertidas y pueden dar lugar a la formación de heridas” (traumatismo externo indoloro), explicó el doctor Braver. Por su parte, la enfermedad vascular periférica o pie isquémico se produce como consecuencia de una mala circulación y/o disminución del flujo sanguíneo en los miembros inferiores, lo que impide la cicatrización y por consiguiente la curación de llagas o infecciones.

“En muchos pacientes con pie diabético se suma un componente vascular donde se altera la circulación. Por lo tanto, el paciente no cicatriza y fácilmente la lesión se extiende con mucha rapidez” detalló Calvagno. “La neuropatía sería el desencadenante de la mayoría de las lesiones, un gran porcentaje de las úlceras, se estima que un 60 por ciento, son producidas por trastornos de la sensibilidad. 

Pero la patología más grave que va a ser la responsable de la falta de cicatrización es la vasculopatía, estos casos corresponderían a un 20 por ciento de los pacientes y el 20 por ciento restante serían mixtas, es decir, neuroisquémicas” comentó Braver.

Ambas problemáticas se potencian y pueden generar serias dificultades en las extremidades del diabético, hasta llegar incluso a una gangrena. Si se llega a este punto, para evitar que se extienda y corra peligro la vida del paciente, en muchos casos el tratamiento habitual consiste en extirpar quirúrgicamente el dedo del pie, el pie y, en ocasiones, hasta parte de la pierna.

“Las estadísticas epidemiológicas indican que cada día se realizan, en instituciones de salud de la Argentina, 19 amputaciones, incluyendo dedos, pies o parte de las piernas. La mayoría de estas cruentas operaciones ocurren como resultado de lesiones por pie diabético” explicó el doctor Braver.

 “El pie diabético es el responsable del 50 por ciento de las amputaciones no traumáticas”, afirmó Calvagno. La especialista agregó además que cuando se habla de amputaciones mayores, se estima que el riesgo de mortalidad aumenta en un 50 por ciento dentro de los 3 y 4 años de producida la amputación. 

“La morbi-mortalidad es sumamente alta, es por eso que en la actualidad, el pie diabético en sí, se toma como un factor de riesgo cardiovascular alto. De los pacientes amputados el 85 por ciento tuvieron antecedentes de lesiones previas, por lo que el sólo hecho de tener o haber tenido una lesión implica que el paciente ya debe ser considerado de alto riesgo cardiovascular”, indicó.

El nuevo producto está indicado, junto a otras terapias convencionales, para el manejo del pie diabético en pacientes con úlceras neuropáticas e isquémicas, que van desde 1 cm2 y llega a favorecer la granulación de lesiones superiores a los 100 cms2 de área.

 Es una formulación inyectable que se aplica directamente en el sitio de la herida. El producto cuenta con patente en más de 12 países, en el país ya está aprobado por la Administración de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT); y actualmente se utiliza con éxito en países como: Cuba, Venezuela y Argelia. “En la actualidad Heberprot-p es el único producto patentado en el mundo para el tratamiento del pie diabético isquémico, lo que conlleva a la ventaja de poder ser utilizado en la variante de pie diabético neuropático, con mas acción positiva”, afirmó Montequín.

Beneficios del nuevo medicamento

Estimula la granulación y cicatrización de forma progresiva y sostenida incluso en úlceras profundas y complejas, reduciendo de esta forma el tiempo de cierre de la lesión.

Reduce el tiempo de cicatrización y con ello, las complicaciones derivadas, tales como la gangrena y la infección o sobre-infección, pues la herida se va haciendo más profunda y se requiere debridar más tejido o incluso llegar a amputar.

Reduce el número de debridaciones (intervención que ayuda a retirar los tejidos necróticos o tejido muerto que no regenera en la zona de la lesión) y de intervenciones quirúrgicas.

Reduce el número de recidivas o reaparición de la lesión.

Es un tratamiento ambulatorio por lo que reduce los costos relacionados con la estadía hospitalaria.

Contribuye significativamente a mejorar la calidad de vida y a la recuperación funcional de los pacientes.
El factor de crecimiento epidérmico (FCE)

El Factor de Crecimiento Epidérmico Humano recombinante (FCE Hu-r) es una proteína presente en animales y en el hombre elaborada y segregada por las células. Es una molécula proteica, sencilla, que estimula tanto la proliferación de fibroblastos como de células epiteliales. 

El científico estadounidense Stanley Cohen lo identificó en los años 60 y recibió en 1986 el Premio Nobel de Medicina. El efecto del Factor de Crecimiento ha sido ampliamente estudiado en el proceso de cicatrización y su eficacia ha sido demostrada tanto in vitro como in vivo[1].

El Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de La Habana, estudió a mediados de la década de los noventa el efecto del factor de crecimiento sobre la restauración de daños en los nervios periféricos sometidos a traumas severos. La infiltración local demostró ser eficaz ya que contribuía al restablecimiento del tejido de granulación, que es el material de unión de los tejidos ante los traumas abiertos.

 Estas evidencias preclínicas permitieron el desarrollo del nuevo producto (Heberprot-p) y fue así que el CIGB y el Instituto Nacional de Angiología y Cirugía Vascular (INACV) lo emplearon con éxito en el primer estudio clínico piloto realizado entre 2001 y 2002.

El Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba, es una institución de desarrollo dinámico que le ha permitido alcanzar un alto nivel en la investigación, desarrollo, producción y comercialización de productos biológicos obtenidos a través de los métodos de la biotecnología moderna. Esta institución, tiene un papel integrador en la esfera de la Biotecnología Cubana, con alta capacidad científico técnica.

Cuidados generales para evitar el pie diabético

Si bien este nuevo producto permite evitar gran porcentaje de las amputaciones producidas por pie diabético es importante destacar que toda persona con diabetes debería controlar, al menos una vez por año, el estado de sus pies. 

“El examen es mínimo, indoloro y se puede realizar en aproximadamente 30 minutos. Muchas veces en el control de rutina, sólo se hace hincapié en revisar los niveles de glucemia del paciente y hay que destacar la importancia que tiene revisar a fondo sus pies para evitar lesiones y prevenir a tiempo complicaciones graves. Esto debería ser un detalle central del control periódico de un diabético: hay que sacarle los zapatos al paciente y revisar sus pies”, afirmó el doctor José Daniel Braver.

Cerca del 85% de los problemas relacionados con el pie diabético podrían evitarse mediante una combinación de buenos cuidados podológicos y educación adecuada, tanto para personas con diabetes como para los profesionales sanitarios que las atienden. El tratamiento temprano y adecuado de las úlceras por equipos multidiciplinarios, especializados en este tipo de pacientes, es uno de los factores clave para evitar llegar a situaciones graves que requieran la amputación.

Fuente: Paradigma PEL Comunicación



Y hoy más información:

“Este producto estimula la formación de tejido de granulación útil, así como la llamada angiogénesis que implica la formación de nuevos vasos sanguíneos.

 Esto permite promover el rápido cierre de la lesión en pacientes diabéticos, que por su misma enfermedad, tienen dificultad para cicatrizar sus heridas y evitar de esta forma la amputación en un alto porcentaje de los pacientes con lesiones profundas que, en muchos casos, eran resistentes al tratamiento convencional” afirmó el doctor José Fernández Montequín, médico especialista en Angiología y Cirugía vascular; asesor del CIGB y Profesor de la Universidad Médica de Cuba.

El medicamento es un novedoso tratamiento, único en su clase: una nueva opción terapéutica para el tratamiento de estas lesiones, ayudando a acelerar la cicatrización de úlceras profundas y complejas derivadas de la diabetes.

Si bien en los últimos años se han desarrollado innumerables herramientas para tratar de manera rápida y selectiva cualquier herida, y mejorar las posibilidades de recuperación y fundamentalmente evitar las amputaciones; un gran número de pacientes ya sea por el tamaño de la lesión o por la falta de cuidado o diagnóstico correcto deben someterse a una amputación.“Toda lesión, sobre todo en el paciente con pie diabético, demora mucho tiempo en cicatrizar por lo que es mayor la posibilidad de infección y por lo tanto mayor también la probabilidad de amputaciones. 

Es por esto que, por lo que hemos podido observar, el mayor beneficio de este nuevo producto es la aceleración en el proceso de cicatrización de heridas. 

El hecho de cerrar mas rápidamente ese tejido y de cubrir esa primera barrera de protección que es la piel en un momento en donde urge el proceso de cicatrización, fundamentalmente en lesiones muy extensas o muy profundas, disminuye el riesgo de infección y por consiguiente el riesgo de amputación.” afirmó la doctora Marta Calvagno , miembro del Servicio de nutrición del Hospital Tornú.

Por su parte, para el doctor José Daniel Braver , coordinador de la Clínica de Pie Diabético y médico del servicio de Cirugía Vascular del Hospital del Clínicas y de FLENI, se trata de una nueva innovación hacia una nueva terapéutica que son los factores de crecimiento. “En mi opinión debido a su fácil aplicación, este producto viene a reemplazar a muchos otros anteriores: la eficacia es muy rápida y el paciente no necesita internarse. Aparentemente este producto podría crear nuevos vasos y así evitar la amputación en pacientes que no tienen otra salida terapéutica” aseguró.

Efectividad demostrada

El nuevo medicamento ha demostrado su seguridad y eficacia a partir de diferentes estudios clínicos controlados. “La literatura registra que el 60 por ciento de los pacientes con pie diabético pueden sufrir una amputación mayor.

 En las diferentes series de estudios realizados, con la aplicación de Heberprot-p la cifra se invierte a un 85 por ciento de salvación de extremidades y sólo un 15% de amputaciones mayores en pacientes portadores de severas isquemias” afirmó el doctor Montequín, quien participó de estudios clínicos realizados con el producto y visitó especialmente la Argentina para la presentación del nuevo medicamentos.


En un último estudio realizado en pacientes con lesiones avanzadas y sin opción de tratamiento disponible salvo la amputación, se logró el cierre total de la herida (un 100% de generación de tejido de granulación) en el 86,8 % de los pacientes (95.80% neuropáticos y 79.30% isquémicos), observándose a las 2 semanas ya un 50% del cierre de la lesión en el 83% de los pacientes (95.80% neuropáticos y 72.40% isquémicos).

 El área promedio de la lesión superaba los 25 cm2 (clasificados según la escala de Wagner como grados 3 o 4), y eran predominantemente pacientes isquémicos lo que hacía más difícil la cicatrización de la úlcera. “En mi experiencia personal con la utilización del producto, la satisfacción de los pacientes es muy significativa.

 Rápidamente pueden observarse resultados; a partir de la sexta aplicación ya se empieza a ver la granulación del tejido y el cierre parcial o total de la herida puedo observarse a las 6 u 8 semanas.

 Se obtienen resultados cercanos al 100 por ciento de cierre de la lesión en úlceras de grados del 1 al 4 de la escala de Wagner. Y después de un adecuado debridamiento, también se obtienen respuestas en un 60 por ciento de los pacientes con úlceras extremadamente severas, de grado 5, donde en el 100 por ciento de los casos la única opción de tratamiento era la amputación”, aseguró el especial

Úlceras neuropáticas y úlceras isquémicas

La falta de control de los niveles elevados de azúcar en sangre característicos de la diabetes, produce un daño progresivo de los nervios y de los vasos sanguíneos de las piernas generando por un lado, lo que se denomina neuropatía diabética o una falta de sensibilidad en los miembros inferiores que favorece la aparición de lesiones; y por el otro lo que se conoce como enfermedad vascular periférica o pie isquémico.
“Cuando hay una neuropatía diabética el paciente se lastima y no se da cuenta; y hay una pérdida de sensibilidad frente al dolor, al calor o al frío. 

Por lo tanto un simple corte o raspadura, heridas por contacto con temperaturas elevadas, la utilización de un calzado inapropiado o callos plantares no tratados son situaciones que por la falta de sensibilidad pasan inadvertidas y pueden dar lugar a la formación de heridas” (traumatismo externo indoloro), explicó el doctor Braver. 

Por su parte, la enfermedad vascular periférica o pie isquémico se produce como consecuencia de una mala circulación y/o disminución del flujo sanguíneo en los miembros inferiores, lo que impide la cicatrización y por consiguiente la curación de llagas o infecciones.

“En muchos pacientes con pie diabético se suma un componente vascular donde se altera la circulación. Por lo tanto, el paciente no cicatriza y fácilmente la lesión se extiende con mucha rapidez” detalló Calvagno.

 “La neuropatía sería el desencadenante de la mayoría de las lesiones, un gran porcentaje de las úlceras, se estima que un 60 por ciento, son producidas por trastornos de la sensibilidad. 

Pero la patología más grave que va a ser la responsable de la falta de cicatrización es la vasculopatía, estos casos corresponderían a un 20 por ciento de los pacientes y el 20 por ciento restante serían mixtas, es decir, neuroisquémicas” comentó Braver.
Ambas problemáticas se potencian y pueden generar serias dificultades en las extremidades del diabético, hasta llegar incluso a una gangrena. 

Si se llega a este punto, para evitar que se extienda y corra peligro la vida del paciente, en muchos casos el tratamiento habitual consiste en extirpar quirúrgicamente el dedo del pie, el pie y, en ocasiones, hasta parte de la pierna.

“Las estadísticas epidemiológicas indican que cada día se realizan, en instituciones de salud de la Argentina, 19 amputaciones, incluyendo dedos, pies o parte de las piernas. La mayoría de estas cruentas operaciones ocurren como resultado de lesiones por pie diabético” explicó el doctor Braver.

 “El pie diabético es el responsable del 50 por ciento de las amputaciones no traumáticas”, afirmó Calvagno. La especialista agregó además que cuando se habla de amputaciones mayores, se estima que el riesgo de mortalidad aumenta en un 50 por ciento dentro de los 3 y 4 años de producida la amputación.

 “La morbi-mortalidad es sumamente alta, es por eso que en la actualidad, el pie diabético en sí, se toma como un factor de riesgo cardiovascular alto. De los pacientes amputados el 85 por ciento tuvieron antecedentes de lesiones previas, por lo que el sólo hecho de tener o haber tenido una lesión implica que el paciente ya debe ser considerado de alto riesgo cardiovascular”, indicó.

El nuevo producto está indicado, junto a otras terapias convencionales, para el manejo del pie diabético en pacientes con úlceras neuropáticas e isquémicas, que van desde 1 cm2 y llega a favorecer la granulación de lesiones superiores a los 100 cms2 de área.

 Es una formulación inyectable que se aplica directamente en el sitio de la herida. El producto cuenta con patente en más de 12 países, en el país ya está aprobado por la Administración de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT); y actualmente se utiliza con éxito en países como: Cuba, Venezuela y Argelia. “En la actualidad Heberprot-p es el único producto patentado en el mundo para el tratamiento del pie diabético isquémico, lo que conlleva a la ventaja de poder ser utilizado en la variante de pie diabético neuropático, con mas acción positiva”, afirmó Montequín.

Beneficios del nuevo medicamento

* Estimula la granulación y cicatrización de forma progresiva y sostenida incluso en úlceras profundas y complejas, reduciendo de esta forma el tiempo de cierre de la lesión.
* Reduce el tiempo de cicatrización y con ello, las complicaciones derivadas, tales como la gangrena y la infección o sobre-infección, pues la herida se va haciendo más profunda y se requiere debridar más tejido o incluso llegar a amputar.
* Reduce el número de debridaciones (intervención que ayuda a retirar los tejidos necróticos o tejido muerto que no regenera en la zona de la lesión) y de intervenciones quirúrgicas.
* Reduce el número de recidivas o reaparición de la lesión.
* Es un tratamiento ambulatorio por lo que reduce los costos relacionados con la estadía hospitalaria.
* Contribuye significativamente a mejorar la calidad de vida y a la recuperación funcional de los pacientes.

El factor de crecimiento epidérmico (FCE)

El Factor de Crecimiento Epidérmico Humano recombinante (FCE Hu-r) es una proteína presente en animales y en el hombre elaborada y segregada por las células. Es una molécula proteica, sencilla, que estimula tanto la proliferación de fibroblastos como de células epiteliales. El científico estadounidense Stanley Cohen lo identificó en los años 60 y recibió en 1986 el Premio Nobel de Medicina. El efecto del Factor de Crecimiento ha sido ampliamente estudiado en el proceso de cicatrización y su eficacia ha sido demostrada tanto in vitro como in vivo[1].

El Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de La Habana, estudió a mediados de la década de los noventa el efecto del factor de crecimiento sobre la restauración de daños en los nervios periféricos sometidos a traumas severos. La infiltración local demostró ser eficaz ya que contribuía al restablecimiento del tejido de granulación, que es el material de unión de los tejidos ante los traumas abiertos. Estas evidencias preclínicas permitieron el desarrollo del nuevo producto (Heberprot-p) y fue así que el CIGB y el Instituto Nacional de Angiología y Cirugía Vascular (INACV) lo emplearon con éxito en el primer estudio clínico piloto realizado entre 2001 y 2002.

El Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba, es una institución de desarrollo dinámico que le ha permitido alcanzar un alto nivel en la investigación, desarrollo, producción y comercialización de productos biológicos obtenidos a través de los métodos de la biotecnología moderna. Esta institución, tiene un papel integrador en la esfera de la Biotecnología Cubana, con alta capacidad científico técnica.

Cuidados generales para evitar el pie diabético

Si bien este nuevo producto permite evitar gran porcentaje de las amputaciones producidas por pie diabético es importante destacar que toda persona con diabetes debería controlar, al menos una vez por año, el estado de sus pies. 

“El examen es mínimo, indoloro y se puede realizar en aproximadamente 30 minutos. Muchas veces en el control de rutina, sólo se hace hincapié en revisar los niveles de glucemia del paciente y hay que destacar la importancia que tiene revisar a fondo sus pies para evitar lesiones y prevenir a tiempo complicaciones graves. Esto debería ser un detalle central del control periódico de un diabético: hay que sacarle los zapatos al paciente y revisar sus pies”, afirmó el doctor José Daniel Braver.

Cerca del 85% de los problemas relacionados con el pie diabético podrían evitarse mediante una combinación de buenos cuidados podológicos y educación adecuada, tanto para personas con diabetes como para los profesionales sanitarios que las atienden. El tratamiento temprano y adecuado de las úlceras por equipos multidiciplinarios, especializados en este tipo de pacientes, es uno de los factores clave para evitar llegar a situaciones graves que requieran la amputación.
Heberprot-P

Heberprot-P es un medicamento novedoso y único prescrito para la terapia de la úlcera del pie diabético (UPD) basado en el factor de crecimiento humano recombinante (FCHrec.), mediante infiltración intralesional directamente en el sitio de la herida. La terapia con HEBERPROT-P llena el espacio de una necesidad médica no satisfecha para el tratamiento de las úlceras complejas del pie diabético.

Existe un interés creciente en el uso de factores de crecimiento para el tratamiento de la úlcera del pie diabético por lo que desde el principio de la década de los noventa se desarrolló en el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología un programa de investigación relacionado con los efectos biológicos de la administración parenteral y repetida del factor de crecimiento epidérmico humano recombinante (FCEhrec).

La experiencia pre-clínica acumulada sobre los efectos farmacológicos del FCEhrec en términos de reparación y cito-protección, la madurez tecnológica alcanzada en su producción como proteína recombinante, la obtención de una adecuada formulación inyectable y la existencia de una mentalidad gerencial bien enfocada al desarrollo de proyectos de investigación, fueron ingredientes activos para el surgimiento del producto HEBERPROT-P, una formulación inyectable que, administrada a través de infiltración intralesional, constituye un tratamiento adyuvante para acelerar la cicatrización de úlceras profundas, complejas, derivadas de este desorden metabólico, tanto neuropáticas como neuroisquémicas.


Propiedades y ventajas que supone el tratamiento con HEBERPROT-P

*

Acelera la cicatrización de UPD profundas y complejas.
*

Disminuye el riesgo de las amputaciones en pacientes con UPD.
*

Tres semanas de tratamiento con este producto han sido suficientes para observar granulación en más del 80% de pacientes con UPD entre 1 y 80 cm2.
*

Contribuye significativamente a mejorar la calidad de vida de los pacientes ya que reduce el número y la extensión de debridaciones quirúrgicas ó remoción del tejido necrótico, además de prevenir las recidivas.
*

Reduce el tiempo de cicatrización y con ello, las complicaciones derivadas, tales como la gangrena y la infección o sobre-infección, posibilitando redestinar recursos a pacientes de pronósticos más difíciles.


Resultados Clínicos

La experiencia pre-clínica acumulada sobre los efectos farmacológicos del EGF en términos de reparación y cito-protección, la madurez tecnológica alcanzada en su producción como proteína recombinante, la obtención de una adecuada formulación inyectable, y la existencia de una mentalidad gerencial bien enfocada en el desarrollo de proyectos de investigación fueron ingredientes activos para el surgimiento del producto HEBERPROT-P®, una formulación inyectable que, administrada a través de infiltración intralesional, constituye un tratamiento adyuvante para acelerar la cicatrización de úlceras profundas, complejas, derivadas de este desorden metabólico, tanto neuropáticas como neuroisquémicas, con índice de presión tobillo/brazo (T/B) entre 0,3-0,8.

A partir de la demostración de que el HEBERPROT-P® contribuía al restablecimiento del tejido de granulación, que es el material de unión de los tejidos ante los traumas abiertos, el CIGB y el Instituto Nacional de Angiología y Cirugía Vascular (INACV) emplearon el HEBERPROT-P® con éxito en un estudio clínico piloto entre los años 2001-02, en 29 pacientes diabéticos tipo-II con micro y/o macroangiopatías vasculares, incluidos pacientes con episodios neuropáticos e isquémicos infecciosos, con úlceras mayores de 20 cm2 (escala III-IV de la clasificación de Wagner). Como resultado de este primer estudio, el 58% de estos pacientes logró salvar la extremidad y el número de recurrencias (nuevos episodios de amputación) fue notablemente bajo.

A finales del 2005 se concluyó un estudio clínico Fase I-II en 41 pacientes, con resultados aún superiores de eficacia del producto, medido por el cierre total de la herida (cicatrización) en ³50% de los pacientes tratados y preservación de la extremidad en el 66% de éstos (Fernández-Montequín José F. et al., (2007). Intralesional Injections of Citoprot-P (recombinant Human Epidermal Growth Factor) in Advanced Diabetic Foot Ulcers with Risk of Amputation. International Wound Journal Dec;4(4):326-327).

HEBERPROT-P® ha sido aplicado con éxito en más de 800 pacientes cubanos aquejados de UPD y en este momento se trabaja aceleradamente en la extensión, a través de la Dirección Nacional de Atención Primaria de Salud, y de conjunto con la Dirección Nacional de Postgrado y el Grupo Nacional de pesquisa activa del MINSAP, en implementar el uso del HEBERPROT-P® y el manejo integral de la UPD en todos los servicios de atención al paciente diabético en los 498 policlínicos de Cuba.

El producto ya está registrado en Cuba y se terminó un estudio clínico fase III controlado, a doble ciegas, aleatorizado y con placebo, en 149 pacientes con resultados muy positivos de seguridad y eficacia. La terapia con HEBERPROT-P® llena el espacio de una necesidad médica no satisfecha para el tratamiento de las úlceras complejas del pie diabético, desde 1 hasta 80 cm2 de extensión, en pacientes neuropáticos o neuroisquémicos.

Resultados Clínicos
heberprot-p.cigb.edu.cu
Heberprot-P es un medicamento novedoso y único prescrito para la terapia de la úlcera del pie diabético (UPD)

Se agradece la colaboración de médicos qué solidariamente colaboran con mi causa desde el muro de mi facebook, en este caso al Dr. Wilfrido Tsuchida Médico de Argentina ProSalud Deportes Alimentación CRUZ BLANCA HUMANISTA INTERNACIONAL FILIAL MISIONES

China probará un fármaco desarrollado por Cuba para tratar úlceras en el pie diabético

China probará en el transcurso de 2012 en sus centros de salud el fármaco desarrollado por los cubanos, Heberprot-P, que es conciderado el único en el mundo que permite la cicatrización de las úlceras en el pie diabético, una enfermedad que puede causar la amputación de estas partes del cuerpo.

El director del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), Luis Herrera Martínez, explicó que en China y Rusia, así como un centenar de hospitales de la Unión Europea realizarán las pruebas clínicas fase III, un paso previo a su aprobación y registro en ambas naciones.

Esta "constituye la indagación más grande acometida en el planeta para el tratamiento de la úlcera del pie diabético", destacó.

Desarrollado por el CIGB conjuntamente con el Instituto de Angiología y Cirugía Vascular, ambos en La Habana, el Heberprot-P contiene un factor de crecimiento epidérmico que acelera la recuperación de las lesiones y sirve como prevención ante la amputación de los miembros inferiores en los diabéticos.

Está considerado entre los fármacos más sobresalientes de la industria biotecnológica cubana. Según cifras oficiales, más de 70 mil personas han empleado el Heberprot-P, que cuenta con patentes otorgadas en más de 40 países y 17 registros sanitarios.

En la actualidad, el medicamento también es empleado en Angola, Argelia, Argentina, Ecuador, México, República Dominicana, Uruguay, Venezuela y Vietnam. Herrera detalló además que en el caso de Cuba, son más de 200 las instituciones de salud que lo utilizan, destacando el Hospital Arnaldo Milián Castro, de Villa Clara, donde su aplicación de manera extensiva y racional, ha resultado un éxito.

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