“Estoy pintando, aprendiendo a tocar cuatro, leo todo lo que puedo, escribo y hago todo lo posible para que la cárcel no se me convierta en una frustración”, relató López.
Desde que el 18 de febrero, cuando Leopoldo López se entregó a las autoridades por haber incitado al odio, a la violencia y al desorden público, se han generado muchos rumores sobre su vida en la prisión.
Él mismo dio declaraciones sobre su vida en la cárcel y aclaró dudas.
El diario colombiano El Tiempo pudo conversar con López mientras se dio su audiencia este 13 de agosto y relató que se quitó la barba con la que se dejó ver en alguna foto que se filtró de la prisión militar de Ramo Verde.
En medio de las declaraciones que ofreció el privado de libertad, apuntó que puede practicar deporte, que hay una pequeña empatía con algunos funcionarios, come bien, pinta, escribe y estudia, sin ningún tipo de inconveniente.
“Cuando entré a prisión, uno de los coroneles me trató muy amablemente y me dijo ‘mire, aquí en la cárcel uno puede decidir dos cosas: crecer como preso o crecer como hombre’, y yo decidí la última, trato de aprovechar mi aislamiento y mi soledad para crecer. Estoy pintando, aprendiendo a tocar cuatro, leo todo lo que puedo, escribo y hago todo lo posible para que la cárcel no se me convierta en una frustración”, agregó.
También añadió que ha logrado algunas relaciones con los custodios.
“El otro día le pedí a uno de los jefes que quería ver la película Libertador y bueno, a los dos días nos mandaron a la celda de Daniel (Ceballos), que tiene un televisorcito y vimos la película, un ‘quemaíto’, de esos piratas”.
Lo cierto es que López lleva una rutina normal y se puede decir que hasta cómoda en la prisión. Su juicio aún no termina, pero su tranquilidad está garantizada en Ramo Verde.
(LaIguana.TV/El Tiempo de Colombia)