El presidente de Bolivia, Evo Morales, abogó este lunes por el fin de las oligarquías, monarquías y jerarquías y de la anarquía financiera, al inaugurar una reunión de sindicatos de varios países que analizarán su unidad contra el capitalismo.
“Un nuevo mundo sin oligarquías, jerarquías, monarquías es posible y, además, sin anarquías financieras”, dijo Morales en un discurso pronunciado al abrir la reunión que se celebra desde hoy y hasta el miércoles en la ciudad central de Cochabamba.
Morales subrayó que ese era uno “de sus sueños” ante un auditorio de sindicalistas convocados por la Central Obrera Boliviana (COB), la organización matriz de los trabajadores de este país, alineada políticamente con el Gobierno de Bolivia.
Mientras existan esos sistemas políticos y la anarquía financiera, “mientras gobiernen banqueros y empresarios”, continuará la lucha de los trabajadores contra “el capitalismo y el imperialismo”, sostuvo.
Al encuentro asisten representantes de sindicatos de Argentina, Brasil, Chile, Cuba, Ecuador, México, Egipto, Estados Unidos, Grecia, India, Perú, Irán, Sudáfrica, Rusia, Uruguay y Venezuela, entre otros, según los organizadores.
Expresó además el respaldo del encuentro a Venezuela porque sufre una “agresión política” del “imperio” y a Argentina porque afronta una “extorsión económica” por los “fondos buitre” (especulativos).
“Es el capitalismo y desde aquí rechazamos y condenamos esa agresión política y económica a dos países de Suramérica”, dijo.
En su discurso, abogó por políticas para vivir en armonía con la naturaleza, destacó la importancia de nacionalizar el control de los recursos naturales y de que los servicios básicos sean un derecho humano y no un negocio privado, entre otras iniciativas.
A juicio de Morales, del encuentro debe salir una nueva “tesis política” para guiar a los trabajadores en sus luchas sociales.
El dirigente máximo de la COB, el minero Juan Carlos Trujillo, recordó que la reunión se celebra a un año del “secuestro del avión del compañero Evo”, en alusión al incidente producido el año pasado con su avión cuando retornaba desde Rusia a Bolivia.
El incidente se produjo el 2 de julio de 2013, cuando la nave de Morales, procedente de Moscú, tuvo que dirigirse al aeropuerto de Viena después de que Portugal, Francia e Italia le impidieran aterrizar o sobrevolar sus territorios, ante la sospecha de que transportaba al exanalista de la CIA Edward Snowden, buscado por Estados Unidos.
Morales dio por zanjado el conflicto diplomático tras aceptar las excusas presentadas por esas naciones europeas y España, a cuyo embajador en Austria acusó de haber intentado revisar su aeronave.
En el acto, el secretario general de la Federación Sindical Mundial (FSM), el griego George Mavrikos, señaló que los sindicatos se encuentran en un momento “muy crucial por la agresividad imperialista” en países como Ucrania, Iraq, Siria, Malí, África Central y hacia gobiernos como los de Venezuela y Cuba.
“Sabemos muy bien que el principal objetivo del imperialismo no es la democracia, ellos son hipócritas cuando dicen que sus intervenciones son por la democracia”, indicó Mavrikos.
Añadió que frente a esta situación, los sindicatos del mundo tienen como arma “la solidaridad y el internacionalismo”.
Según el líder griego, en el encuentro en Cochabamba se debatirán las tareas que deberán asumir los sindicatos para continuar en una dirección “antiimperialista”.
LibreRed / EFE