China está ampliando intensamente sus reservas de oro. Según calcularon los expertos de Lombard Street Research, ya podría contar con el doble de lo que tenía hace 5 años, siendo una tendencia amenazante a la influencia del dólar estadounidense.
Los volúmenes récord de compras de este metal precioso, registrados al término del año pasado, podrían convertir al yuan en una nueva divisa de reserva internacional dentro de unos pocos años, pronostica un informe del grupo de expertos citado por la CNBC. Por primera vez el país adelantó en 2013 a la India como el mayor consumidor de oro.
Se dispararon al mismo tiempo los suministros de joyería, las compras de lingotes pequeños de oro y la acuñación de las famosas 'monedas panda', revelan los analistas de Lombard.
La creciente demanda china causó la subida del precio en los mercados internacionales en más de un 4% la semana pasada, aunque las autoridades del país descartan que detrás de esa tendencia esté alguna iniciativa suya.
"El flujo masivo de oro al país aparentemente hace plausible que ellas [las autoridades chinas] se podrían mover hacia la utilización del oro en un esfuerzo para internacionalizar su divisa y evitar lo que se percibe como el predominio del dólar", dijo una de las economistas del grupo, Freya Beamish, en un comentario concedido a la CNBC.
La última cifra de las reservas estatales de oro declarada oficialmente por China fue de 1.054 toneladas, pero data del año 2009 y desde entonces no ha sido renovada.
Según los cómputos del director general de la empresa American Precious Metals Advisors, Jeffrey Nichols, el Banco Popular de China adquirió entre 2009 y 2011 unas 654 toneladas y 388 toneladas más en 2012.
Los expertos sospechan que Pekín esté actuando tácitamente para no alarmar a los mercados y reservarse las oportunidades para continuar las compras a precios moderados.
Y con la misma finalidad las autoridades financieras chinas volverían a pronunciarse en que no ven el oro como un remedio para diversificar sus activos.