El jeque Salah al-Luhaydan advierte a las mujeres sauditas que desafían la prohibición de conducir que sentarse al volante puede afectar a los ovarios y a pelvis, informa Al Arabiya citando medios locales.
"[Conducir] podría tener un impacto fisiológico.
La ciencia y la medicina fisiológica funcional estudiaron este asunto [y encontraron] que afecta automáticamente a los ovarios y a la pelvis", dijo en televisión el jeque, que asegura que "los niños de las mujeres que conducen continuamente coches nacen con trastornos clínicos de diverso grado".
En un intento por disuadir a las mujeres para que no conduzcan, esta semana la Policía de Tráfico de Arabia Saudita puso multas por valor de unos 1.500 dólares a varios propietarios de vehículos por "permitir conducir a una persona no cualificada".
En un intento por disuadir a las mujeres para que no conduzcan, esta semana la Policía de Tráfico de Arabia Saudita puso multas por valor de unos 1.500 dólares a varios propietarios de vehículos por "permitir conducir a una persona no cualificada".
"Estaban conduciendo por diversión y no para aprender a manejar un vehículo", esgrimió el portavoz de la Policía, Mansur al Shakra.
Aunque en el país no existe ninguna ley que prohíba explícitamente conducir a las saudíes, a las mujeres no se les conceden licencias, lo que en la práctica significa que la conducción femenina es ilegal.
Las activistas saudíes instan a las mujeres del país a ponerse al volante el 26 de octubre para reivindicar el derecho a conducir.
Aunque en el país no existe ninguna ley que prohíba explícitamente conducir a las saudíes, a las mujeres no se les conceden licencias, lo que en la práctica significa que la conducción femenina es ilegal.
Las activistas saudíes instan a las mujeres del país a ponerse al volante el 26 de octubre para reivindicar el derecho a conducir.
En el marco de esta nueva campaña por el derecho femenino a conducir, que se presenta como 'October 26 Driving', los activistas publicaron también una petición abierta al Gobierno del país.
"El Estado no es nuestro padre ni nuestra madre, y los ciudadanos no son sus niños", reza el texto.