En Siria hay libios, tunecinos, iraquíes, turcos, árabes de todos los países europeos y chechenos también.
La idea que fue dando la prensa global desde sus titulares victoriosos desde hace 2 años es que Siria caería como Libia.
No fue raro que conocidos corresponsales de guerra occidentales murieran en los primeros días, esperaban que fuera todo rápido y sin retroceso como contra Kadhafi, pero sin la OTAN no hay paraíso.
En Libia todas estas bandas salvajes, perros de muchas guerras en donde la media global las presentaba como enemigos, se enfrentaron a un ejército libio demolido por más de 24.000 salidas aéreas de la OTAN.
En Libia todas estas bandas salvajes, perros de muchas guerras en donde la media global las presentaba como enemigos, se enfrentaron a un ejército libio demolido por más de 24.000 salidas aéreas de la OTAN.
Allá fueron a repetir en Siria, pero la OTAN no estuvo y fue la hoguera donde Occidente lanzó sus esbirros, aliados inconfesables, de una Al Qaeda vendida como demonio por los medios en el WTC, en el Metro de Londres y en los trenes de España.