El fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que puso fin al conflicto limítrofe entre Nicaragua y Colombia difícilmente hubiera podido salir mejor, “ya que la Corte reconoció realmente los derechos de Nicaragua dentro de los límites de las circunstancias”, expresó el doctor Carlos Argüello, representante de Nicaragua ante el tribunal internacional.
En comunicación telefónica desde La Haya, Holanda, Argüello declaró al Programa En Vivo, de Canal 4, que lo importante para Nicaragua era que la CIJ reconociera la soberanía nicaragüense sobre los espacios marítimos que Colombia se arrogaba exclusivamente.
El presidente del CIJ, Peter Tomka, quien dio lectura al fallo, indicó que el tribunal concedía a Managua un área marítima más allá de 12 millas de los cayos de Serrana y Quitasueño al norte y otro espacio al sur de los de Alburquenque y Este Sudeste, pero confirmó el espacio marítimo colombiano en torno al resto de las islas del archipiélago de San Andrés.
Con la nueva delimitación, la Corte rechazó traspasar al Este, más allá de la isla Roncador, la frontera que hasta hoy pretendía ser establecida por Colombia en el meridiano 82.
La CIJ soportó su decisión al señalar que Nicaragua tienen una porción de tierra tres veces mayor frente al territorio marítimo que Colombia estaba queriendo adueñarse.
La CIJ resolvió que las Cayos Quitasueño y Serrana tienen unas 12 millas náuticas de territorio marítimo en sus alrededores, mientras donde se encuentra la isla San Andrés y Providencia y otros cayos se estableció un espacio marítimo de Colombia.
El ente internacional reconoció que Nicaragua es soberana de la plataforma marítima hasta acercarse al meridiano 79 (80 grados 59 minutos y 22.6 segundos longitud oeste).
Ante este fallo, el canciller nicaragüense, Samuel Santos López, informó que “celebran el veredicto unánime de la CIJ”.
“Es significativo el carácter unánime a la decisión. Nicaragua está satisfecha porque ha salido de la jaula del Meridiano 82 en la que Colombia quiso meterla desde tiempos inmemoriales. Creemos que es una solución inteligente y sabia de la CIJ”.
Argüello recordó que con algunas formaciones marítimas en el océano, Colombia pretendía adueñarse de los espacios marítimos nicaragüenses.
“Ahora la Corte le dijo que no, no es así; ni el 82 es límite, ni tampoco estamos encerrados en frente de las islas, así que la Corte nos ha dado unos espacios marítimos importantísimos”, explicó Arguello.
Indicó que en la parte norte de la frontera marítima, que ahora pasa más allá del meridiano 82, llegando casi al meridiano 79, “es donde está la plataforma continental más importante de Nicaragua”.
“En realidad lo que le ha agregado esto es un potencial de riqueza y un futuro de explotación de pesca y de otros tipos de recursos increíbles a Nicaragua”, manifestó.
El representante de Nicaragua ante La Haya expresó que con la victoria de Nicaragua en ese tribunal, es una reivindicación y comentó que el país nunca debió estar encerrado en el meridiano 82, límite impuesto arbitraria y militarmente por Colombia.
“Ahora eso definitivamente ha quedado olvidado, ya tenemos una delimitación marítima que nos va a permitir desarrollarnos plenamente”, remarcó.
Argüello también dejó claro que el tema de las Islas de San Andrés y Providencia, quedaron excluidos de la demanda desde el 2007, cuando la Corte dijo que no tenía jurisdicción para conocer ese punto.
No obstante, recordó que aún no hay una resolución definitiva, de la CIJ, sobre el tema de San Andrés.
Finalmente Argüello recordó que el origen de la lucha nicaragüense por su soberanía en el mar, empezó el primero de febrero de 1980 con la declaratoria de nulidad que hizo el Gobierno Sandinista del tratado de 1928.
“Esa fue la primera vez que se le paró un Gobierno de frente y fuertemente a Colombia y ahorita estamos viendo el resultado final”, afirmó. Por su parte el Viceministro del Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (MARENA), Roberto Araquistaín destacó que con la ampliación de los territorios marítimos de Nicaragua en el océano, se esperan entre 60 y 70 toneladas más de productos marinos que podrán ser aprovechados por Nicaragua.
“Podemos estar esperando 60 ó 70 (miles de toneladas de productos marinos) que es un excelente stock para tener una pesca bien armonizada con el medio ambiente, con los esfuerzos necesarios para que las especies de la zona puedan desarrollarse y producir siempre, de manera sostenible”, explicó Araquistain, agregando que el país protegerá los recursos naturales marinos.
Por otro lado, señaló que Nicaragua podrá realizar las exploraciones necesarias sin esperar reacciones de parte de Colombia. Finalmente comentó que sólo el Gobierno Sandinista es el que se ha preocupado por la restitución de los derechos que pertenecen a los nicaragüenses.