
Decenas de miles de ciudadanos pakistaníes se manifestaron ayer por las calles de la ciudad de Alto Dir, cercana a la frontera afgano-pakistaní, para expresar su protesta contra los crímenes que cometen los mercenarios del ejército estadounidense y la creciente injerencia del gobierno de Obama en los asuntos internos de Pakistán, exigiendo a Islamabad que rompa sus relaciones con Washington.