
Al menos 109 personas han muerto y otras 240 han resultado heridas por la ola de atentados perpetrados este domingo en más de una decena de puntos de Irak.
Aún resuenan las palabras de Barack Obama cuando anunció la incumplida retirada de las tropas mercenarias de su ejército: “Irak ya es un país más seguro“.
Desde la invasión estadounidense hasta hoy, el número de muertes de civiles inocentes sobrepasa el medio millón.