Un nuevo grupo radical de insurgentes se está formando en Afganistán con el objetivo de aterrorizar tanto a las autoridades como a otros grupos extremistas, según fuentes de la inteligencia afgana.
El Servicio de Inteligencia de Afganistán considera que el nuevo Frente Dadullah ya está ejerciendo presión psicológica sobre algunos legisladores mediante mensajes y llamadas telefónicas para que no apoyen el acuerdoestratégico sobre la colaboración de Kabul con Estados Unidos.
Las amenazas llegan de parte de personas que dicen actuar como miembros del Frente que toma su nombre del comandante talibán Mullah Dadullah, cercano a Al Qaeda, algo que probablemente fue el motivo de su asesinato en 2007.
Los servicios de seguridad anunciaron que ya habían detenido a tres personas supuestamente vinculadas con el Frente Dadullah y consideran que detrás de estas personas hay un grupo mayor.
Por su parte, el movimiento extremista talibán niega la aparición de un grupo islamista más radical y sostiene que detrás de las llamadas y mensajes está una sola persona.