Y la hija del Borbón quede al margen de todo.
En la mañana de hoy, el coro mediático del régimen ha salido en tromba en defensa de la monarquía.
En la mañana de hoy, el coro mediático del régimen ha salido en tromba en defensa de la monarquía.
En la prensa capitalista se escucha y se lee que Urdangarín ha estado firme y sin desfallecer en las más de 22 horas de declaración ante el juez, elogian su actitud de colaborar con la justicia.
Dicen que sus dotes de deportista le ayudan en estos momentos tan complicados y que va quedando claro que su socio es el culpable de todo y que la Infanta, y mucho menos Juan Carlos no tiene nada que ver en la trama de corrupción.
Es muy posible que el caso derive en que todo es un montaje de comunistas, anarquistas e independentistas que quieren hacerle daño a la corona.
inSurGente
Urdangarin comparecía para demostrar su "inocencia y honor".
inSurGente
Urdangarin comparecía para demostrar su "inocencia y honor".
No lo ha logrado.
No al menos a los ojos del juez Castro, que dejó ayer claro que los problemas de Urdangarin con la Justicia no acaban aquí.
Más de 22 horas de interrogatorio en dos días, en los que el duque respondió a más de quinientas preguntas, no le han bastado al juez. José Castro, sencillamente, no se cree la versión del yerno del Rey.
Ni le valen los "no lo sé" del Urdangarin que declaró el primer día, ni le sirven los "no lo recuerdo" con los que el imputado depuró ayer su versión de los hechos, que es en realidad tan simple como parecida a la que desde hace tres años usa Jaume Matas para defenderse de acusaciones similares: él era el presidente de la asociación sin ánimo de lucro que está en el ojo del huracán, cierto, y también era el socio y beneficiario de las principales empresas del entramado societario acusado de "vaciar de fondos públicos el Instituto Nóos", pero su papel era meramente institucional.
Diario de Malorca
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