APORREA.ORG / Agencias – Mientras Hugo Chávez se prepara en Cuba para una cirugía por una nueva lesión que podría ser cancerígena, expertos médicos creen que si se trata de una recurrencia el líder venezolano tiene posibilidades de curarse, aunque podría sentirse muy fatigado para mantener el ritmo en la campaña hacia su reelección.
Luego de declararse curado del cáncer a fines de octubre, Chávez dijo esta semana que ahora tiene una lesión de dos centímetros en la misma zona pélvica de donde el año pasado le fue extraído en Cuba un tumor del tamaño de una pelota de béisbol.
Los médicos dicen que la posibilidad de que el cáncer haya reaparecido es preocupante, pero que una segunda cirugía le dará otra oportunidad de curarse.
Chávez ha dicho que aún no se determinó si la nueva lesión es cancerígena, pero la mayoría de los médicos creen que se trata de una recurrencia.
Richard Schilsky, especialista en cáncer gastrointestinal de la Universidad de Medicina de Chicago, dijo que si la lesión fuese maligna y “está localizada, pueden sacarla y tienen buenos márgenes quirúrgicos”. Schilsky no está tratando a Chávez.
“Es difícil de decir sin saber cuál fue el tumor inicial. La recurrencia local del cáncer de colon es menos común que la del cáncer rectal”, sostuvo Schilsky.
El doctor Charles Fuchs, director del programa de oncología gastrointestinal del Dana-Farber Cancer Institute en Boston, dijo que el cáncer rectal es más propenso a la recurrencia local que el de colon porque la pelvis es una zona ajustada donde es difícil que los cirujanos obtengan márgenes limpios.
“No se ha dicho nada sobre el origen del cáncer. Todo lo que sabemos es que había un tumor en la pelvis. Luego de eso tuvimos una serie de ciclos de quimioterapia, presumiblemente unos 6. Ni siquiera sabemos qué medicamentos tomó con la quimioterapia”, dijo Sunil Daryanani, oncólogo del hospital Clínicas Caracas.
Afirmó que dado que el tumor de Chávez fue diagnosticado con una infección, una recurrencia local no sería una sorpresa, aunque dijo que el periodo entre el tratamiento y el nuevo avance sería muy breve.
TRATAMIENTO
“Esto podría implicar que la quimioterapia original no fue lo suficientemente efectiva, pero esto es sólo especulación”, dijo Daryanani. “Cuando lo abran (el lunes o martes), ellos tendrán una idea de si esta es una recurrencia local o algo más avanzado”, expresó.
Si fuera una reaparición local de cáncer, los médicos removerían el tumor y luego usarían radiación para “esterilizar” el área a fin de matar cualquier resto de células locales cancerígenas, explicó el doctor Michael Pishvaian, especialista en cáncer gastrointestinal en el Lombardi Comprehensive Cancer Center de la Universidad de Georgetown.
La radiación comienza normalmente alrededor de un mes después de la cirugía e involucra un tratamiento diario, de lunes a viernes, por entre cinco a seis semanas. Ese tratamiento podría extenderse hasta mediados de mayo.
Los efectos colaterales suelen ser moderados y localizados y la fatiga es usualmente el mayor problema, dicen los doctores.
“Algunos pueden volver a trabajar el mismo día, otros están severamente fatigados y necesitan descansar todo el tiempo”, dijo Pishvaian.
El médico agregó que, si atravesara ese tratamiento, Chávez podría seguir adelante con sus actividades como presidente, pero “en términos de los rigores de una campaña (electoral), eso podría ser muy duro para cualquiera que esté siendo sometido a radiación”.
“Creo que definitivamente podría tener un impacto en medio de las elecciones”, comentó.
En cuanto los cuidados que recibirá Chávez en Cuba, Pishvaian dijo que ha escuchado que la preparación médica en la isla es sorprendentemente buena y que el tratamiento que el mandatario venezolano necesitaría está ampliamente disponible.
Luego de declararse curado del cáncer a fines de octubre, Chávez dijo esta semana que ahora tiene una lesión de dos centímetros en la misma zona pélvica de donde el año pasado le fue extraído en Cuba un tumor del tamaño de una pelota de béisbol.
Los médicos dicen que la posibilidad de que el cáncer haya reaparecido es preocupante, pero que una segunda cirugía le dará otra oportunidad de curarse.
Chávez ha dicho que aún no se determinó si la nueva lesión es cancerígena, pero la mayoría de los médicos creen que se trata de una recurrencia.
Richard Schilsky, especialista en cáncer gastrointestinal de la Universidad de Medicina de Chicago, dijo que si la lesión fuese maligna y “está localizada, pueden sacarla y tienen buenos márgenes quirúrgicos”. Schilsky no está tratando a Chávez.
“Es difícil de decir sin saber cuál fue el tumor inicial. La recurrencia local del cáncer de colon es menos común que la del cáncer rectal”, sostuvo Schilsky.
El doctor Charles Fuchs, director del programa de oncología gastrointestinal del Dana-Farber Cancer Institute en Boston, dijo que el cáncer rectal es más propenso a la recurrencia local que el de colon porque la pelvis es una zona ajustada donde es difícil que los cirujanos obtengan márgenes limpios.
“No se ha dicho nada sobre el origen del cáncer. Todo lo que sabemos es que había un tumor en la pelvis. Luego de eso tuvimos una serie de ciclos de quimioterapia, presumiblemente unos 6. Ni siquiera sabemos qué medicamentos tomó con la quimioterapia”, dijo Sunil Daryanani, oncólogo del hospital Clínicas Caracas.
Afirmó que dado que el tumor de Chávez fue diagnosticado con una infección, una recurrencia local no sería una sorpresa, aunque dijo que el periodo entre el tratamiento y el nuevo avance sería muy breve.
TRATAMIENTO
“Esto podría implicar que la quimioterapia original no fue lo suficientemente efectiva, pero esto es sólo especulación”, dijo Daryanani. “Cuando lo abran (el lunes o martes), ellos tendrán una idea de si esta es una recurrencia local o algo más avanzado”, expresó.
Si fuera una reaparición local de cáncer, los médicos removerían el tumor y luego usarían radiación para “esterilizar” el área a fin de matar cualquier resto de células locales cancerígenas, explicó el doctor Michael Pishvaian, especialista en cáncer gastrointestinal en el Lombardi Comprehensive Cancer Center de la Universidad de Georgetown.
La radiación comienza normalmente alrededor de un mes después de la cirugía e involucra un tratamiento diario, de lunes a viernes, por entre cinco a seis semanas. Ese tratamiento podría extenderse hasta mediados de mayo.
Los efectos colaterales suelen ser moderados y localizados y la fatiga es usualmente el mayor problema, dicen los doctores.
“Algunos pueden volver a trabajar el mismo día, otros están severamente fatigados y necesitan descansar todo el tiempo”, dijo Pishvaian.
El médico agregó que, si atravesara ese tratamiento, Chávez podría seguir adelante con sus actividades como presidente, pero “en términos de los rigores de una campaña (electoral), eso podría ser muy duro para cualquiera que esté siendo sometido a radiación”.
“Creo que definitivamente podría tener un impacto en medio de las elecciones”, comentó.
En cuanto los cuidados que recibirá Chávez en Cuba, Pishvaian dijo que ha escuchado que la preparación médica en la isla es sorprendentemente buena y que el tratamiento que el mandatario venezolano necesitaría está ampliamente disponible.