En medio de la temporada de tormentas solares
más intensa desde septiembre del 2005, otra llamarada del astro enviará
radiaciones a la Tierra hasta este miércoles.
Mientras tanto, las
auroras boreales se pueden ver en los lugares más inesperados.
La Administración Nacional de los Océanos y la Atmósfera (NOAA) de Estados Unidos indicó que su Centro de Pronósticos de Clima Espacial, en Colorado, observó la erupción solar el domingo a las 16:00 GMT. La radiación comenzó a llegar a la Tierra una hora más tarde y continuará hasta el miércoles.
El campo magnético de la Tierra está ya afectado por una eyección de masa de la corona solar, después de una erupción ocurrida en la superficie del Sol el jueves 19 de enero, según los astrónomos.
La Administración Nacional de los Océanos y la Atmósfera (NOAA) de Estados Unidos indicó que su Centro de Pronósticos de Clima Espacial, en Colorado, observó la erupción solar el domingo a las 16:00 GMT. La radiación comenzó a llegar a la Tierra una hora más tarde y continuará hasta el miércoles.
El campo magnético de la Tierra está ya afectado por una eyección de masa de la corona solar, después de una erupción ocurrida en la superficie del Sol el jueves 19 de enero, según los astrónomos.
La agencia gubernamental indicó que la tormenta cobra fuerza y una oleada de radiación se dirige rápidamente a la Tierra.
"Debido a este fenómeno es casi seguro que habrá una tormenta geomagnética", señaló en un comunicado la NOAA. "La llamarada solar asociada alcanzó su máxima altura el 23 de enero a las 04:00 GMT", añadió.
Un modelo informático, hecho por el Centro de Pronósticos, indica que esta oleada tendrá su mayor efecto en el campo magnético de la Tierra este martes.
El problema principal de esta radiación es la interferencia con el funcionamiento de los satélites y es un inconveniente en particular para los astronautas en el espacio.
"Debido a este fenómeno es casi seguro que habrá una tormenta geomagnética", señaló en un comunicado la NOAA. "La llamarada solar asociada alcanzó su máxima altura el 23 de enero a las 04:00 GMT", añadió.
Un modelo informático, hecho por el Centro de Pronósticos, indica que esta oleada tendrá su mayor efecto en el campo magnético de la Tierra este martes.
El problema principal de esta radiación es la interferencia con el funcionamiento de los satélites y es un inconveniente en particular para los astronautas en el espacio.
Las tormentas solares suelen ocasionar auroras boreales y gracias a la
actividad solar, tan alta en esta temporada, el fenómeno se ha
extendido a varios países en los que habitualmente no se observan, por
ejemplo Reino Unido.