ERNESTO CARMONA* – Los grandes medios de Chile y
Latinoamérica destacaron esta semana “los dos años de vida” que le dio
al presidente Hugo Chávez el galeno caraqueño Salvador Navarrete, quien
dijo en una revista mexicana muy poco conocida -M Semanal- haber
pertenecido a su equipo médico, pero ninguno de esos medios recogió el
contundente desmentido que ofrecieron el sábado los verdaderos médicos
del presidente venezolano.
Según un despacho de la agencia española EFE, “el equipo médico del
presidente de Venezuela, Hugo Chávez, desmintió este sábado la versión
del doctor Salvador Navarrete, quien afirmó la semana pasada que la
expectativa de vida del mandatario era de sólo dos años”.
El cable añadió que “los profesionales también descartaron que el
líder venezolano sufra de bipolaridad. ‘Nosotros podemos dar fe, porque
hemos sido médicos tratantes y somos médicos tratantes del presidente,
que se encuentra en un inmejorable estado de salud y que su evolución ha
sido completamente satisfactoria’, dijo el profesional Fidel Darío
Ramírez en una rueda de prensa”.
El montaje mediático destinado a sembrar dudas sobre la recuperación
del jefe de Estado venezolano se basó en que, supuestamente, Navarrete
formaba parte del equipo médico que atiende al mandatario, pero este
sábado el Dr. Ramírez dijo que el galeno caraqueño “nunca ha sido médico
tratante del presidente Hugo Chávez ni ha formado parte de su equipo de
confianza”.
El Dr. Ramírez leyó un comunicado en que se precisa que el
cirujano Navarrete solo participó en “un par de ocasiones” en
entrevistas “informales” con el presidente junto a otros médicos y sin
realizarle exámenes.
Respecto al tipo de cáncer de Chávez, según EFE el Dr. Ramírez
precisó:
“El presidente tiene un cáncer que fue localizado en la región
pélvica, fue tratado de una manera exitosa y a tiempo, y yo creo que
esto es suficiente para todos”.
Por otra parte, el doctor Rafael Vargas,
también ex ministro de la Secretaria de la Presidencia, aseguró que el
presidente “jamás ha tenido tratamiento psiquiátrico”, respondiendo a la
“bipolaridad” que Navarrete le adjudicó al presidente Chávez.
La agencia EFE citó una carta que Navarrete publicó el viernes en el
diario TalCual de Caracas, donde asegura que se vio “obligado a salir
del país” de manera “abrupta” y, sin revelar dónde se encuentra, dijo
que su diagnóstico fue “presuntivo” y que el semanario mexicano publicó
“una innumerable cantidad de tergiversaciones y elucubraciones”.
Pero nada de esto se dijo en los grandes medios chilenos.
En
particular, la Televisión Nacional de Chile, que pertenece al Estado,
siguió ofreciendo el sábado la versión de Navarrete apoyada con una
maqueta del cuerpo humano y la ubicación exacta del supuesto “sarcoma”
descrito por el galeno caraqueño, pero además consiguió a otro médico
local para que comentara y ratificara sus dichos a más de 7.000 km de
distancia.
Esta campaña mediática internacional es tan abusiva y
necrófila que resulta desfachatada y su repetición mecánica en Chile
contribuye a la creciente pérdida de credibilidad de los medios locales,
acentuada por su cobertura sesgada del conflicto social-educacional que
atraviesa hoy a la sociedad y mantiene paralítico al gobierno de
Sebastián Piñera.
*) Ernesto Carmona, periodista y escritor chileno