
APORREA / Agencias – El presidente ecuatoriano Rafael Correa
tiene una aceptación del 75%, la misma que tenía en abril de 2007,
cuando comenzó su gestión. Santos y Funes son sus escoltas; Sebastián
Piñera, el peor evaluado.
La nómina de aceptación fue divulgada por la empresa mexicana de
estudios de mercado Consulta Mitofsky, que no realizó las mediciones
sino que recopiló encuestas publicadas en importantes medios de
comunicación en veinte países del continente.
Los resultados indican que después de Rafael Correa, cuya popularidad
tuvo un repunte destacado desde el 58% que registraba en enero, figura
el colombiano Juan Manuel Santos (67%), quien junto con el salvadoreño
Mauricio Funes (65%) superan holgadamente la media de 48% que arrojó el
promedio latinoamericano.
Empatados en la siguiente posición se encuentran los presidentes de
Venezuela y Perú, Hugo Chávez y Ollanta Humala, con el 55,3% y 55%
respectivamente; seguidos por el panameño Ricardo Martinelli (51,6%), el
mexicano Felipe Calderón (50,3%) y la argentina Cristina Kirchner
(50%).
También por encima del promedio, aunque muy lejos de los primeros
lugares, se encuentran la brasileña Dilma Rouseff y el guatemalteco
Álvaro Colom, ambos con el 49%, seguidos por el hondureño Porfirio Lobo
(45%), el paraguayo Fernando Lugo (44%), el estadounidense Barack Obama
(42,7%) y el nicaragüense Daniel Ortega (42%).
La zona baja de la tabla la ocupan el uruguayo José Mujica, con un
41% de respaldo popular, el canadiense Stephen Harper (40%) y el
dominicano Leonel Fernández (38%).
Los peor calificados son el boliviano Evo Morales, con un 37%, la
costarricense Laura Chinchilla, con el 36%, y el chileno Sebastián
Piñera, que apenas cuenta con el 27% de los apoyos, una cifra muy
inferior al 52% con que contaba al empezar su gestión y del 83% de su
antecesora, la socialista Michelle Bachelet.
En términos subregionales, los presidentes de países sudamericanos
son los mejor calificados, con una media del 49%; le siguen los de
Centroamérica, con el 48%, y los de Norteamérica, con el 45 por ciento.
Además de la evaluación de los líderes americanos, Mitofsky investigó
también los niveles de popularidad de otros de diez países más.
Algunos
de los datos salientes de ese reporte son el notable apoyo de la
lituana Dalia Grybauskaite (81%) y del ruso Dimitri Medvedev (73%).
Como
contraparte, el jefe de gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero,
fue el peor evaluado, con un 21% que lo deja, al igual que el italiano
Silvio Berlusconi (22,1%), incluso por debajo de Piñera.