Un hecho sobre los neandertales es que tenían piernas cortas. La explicación para esta diferencia con respecto a los sapiens,
solía ser que era una adaptación a los climas fríos.
Pero como venimos
viendo con muchas de las características neandertales, esta tampoco
parece haber sido consecuencia del clima frio en el que los neandertales
pasaron gran parte de su historia evolutiva.
Un estudio publicado recientemente aduce que las piernas cortas
permitían a los neandertales moverse de una forma más eficiente por los
paisajes montañosos en los que solían vivir.
En vez de ser una
desventaja, moverse con piernas cortas por terreno escabroso y en
pendiente, habría sido una ventaja.
Lo mismo descubrieron los autores
del estudio para animales modernos que habitan en zonas similares.
Según Ryan W. Higgins y Christopher B. Ruff, autores del estudio publicado en American Journal of Physical Anthropology,
las piernas cortas sólo resultarían una desventaja en terrenos planos,
ya que uno debe dar más pasos, y por ende gastar mas energía para
recorrer una distancia dada. Pero en pendientes, cuestas y barrancos,
tener piernas más cortas era una ventaja.
Los autores
utilizaron un modelo matemático para medir la relación entre la
proporción de las piernas y el ángulo de ascensión.
Descubrieron que si
la parte inferior de la pierna, o sea debajo de la rodilla, es más
corta, uno puede dar pasos más grandes cuando sube una pendiente, esto
es porque uno no tiene que doblar la rodilla o las caderas tan seguido
para sortear el terreno.
Este tipo de estudio también lo habían
realizado en bóvidos como gacelas, antílopes, cabras y ovejas. Allí
también vieron que las especies montañosas tenían la parte inferior de
sus piernas más cortas que las especies que viven en las planicies, sin
que el clima tuviese algo que ver en el asunto.
Fuente: LiveScience, ScienceDaily