Muere más gente debido a los ataques militares y económicos de EEUU
en lugares como Somalia y Congo que en las guerras más conocidas del
imperio estadounidense.
Estas “otras guerras” acaban con “cientos de
miles –millones– de vidas, y han dado lugar, o han contribuido, a las
dos peores crisis humanitarias de África durante los últimos cuatro
años.”
El anuncio del presidente Obama de donar 105 millones de dólares a
Somalia es sólo una cínica distracción del hecho de que EEUU usa los
alimentos como un arma de guerra.
“Las agencias
internacionales de ayuda temen las represalias de los estadounidenses si
distribuyen comida en el territorio controlado por Shabab”.
El 20 de Agosto, la Coalición por la Justicia Social, la Paz y las Reparaciones Black is Back,
ha convocado a un Día Internacional de Acción contra las “otras
guerras”.
La primera pregunta de la gente es: ¿a qué te refieres con
“otras guerras”?
Cualquier explicación debe incluir la guerra de EEUU
contra Somalia, como parte de un proyecto estadounidense para
militarizar y dominar el Cuerno de África.
Se trata de una
guerra no declarada, como todas las “otras guerras” de EEUU –aquellas
que el movimiento antiguerra de EEUU, dominado por los blancos de la
vieja guardia, no siente que tengan la categoría suficiente para
incluirlas en su lista de guerras-.
Sin embargo, estas guerras acaban
con cientos de miles –millones– de vidas, y han dado lugar, o han
contribuido, a las dos peores crisis humanitarias en África durante los
últimos cuatro años.
EEUU ha robado no solo las vidas del pueblo de
Somalia, sino también su soberanía sobre su tierra natal. Si eso no es
una guerra, entonces la palabra misma carece de significado.
Somalia
tuvo algo parecido a la paz, y un gobierno para proteger la paz, por un
muy breve periodo de tiempo antes de que EEUU instigara y armara una
invasión etíope del país, a finales de 2006.
Aplastaron y dispersaron el
gobierno islamista –llamado los Tribunales Islámicos– cuya rama más
joven, Shabab, organizó entonces una resistencia de guerrillas.
Casi de
manera inmediata, el país se vio sumergido en lo que las Naciones Unidas
llamaron “la peor crisis humanitaria de África.”
Los estadounidenses
usaron soldados extranjeros de Uganda y Burundi, sus Estados clientes en
África, para apuntalar un lamentable y fraudulento mini-Estado en la
capital, Mogadisicio. Incapaz de controlar las zonas rurales, e incluso
la mayor parte de la capital, EEUU hizo entonces extremadamente difícil
para los proveedores de ayuda alimentaria extranjera que llegaran a la
gente en las zonas controladas por Shabab.
Esto preparó el escenario
para la siguiente gran crisis humanitaria, cuando la peor sequía de los
últimos sesenta años golpeó a la mayor parte del Cuerno de África,
amenazando la vida de decenas de millones de personas en Somalia, Kenia,
Etiopía y Yibuti.
Pero los somalíes eran los más expuestos, porque las
agencias internacionales de ayuda temían las represalias de los estadounidenses si distribuían comida en el territorio controlado por Shabab.
“Los 105 millones de dólares de Obama son menos de la mitad de la asistencia que EEUU envío en 2008.”
Ahora el presidente Obama ha anunciado, a bombo y platillo, que EEUU enviará 105 millones de dólares
para alimentar a los somalíes, dondequiera que estén pasando hambre.
Pero muchas agencias de ayuda no se creen que EEUU vaya en serio cuando
dice que va a dejar de usar los alimentos como un arma de guerra, y son
reticentes a retomar la distribución de alimentos.
Y los 105 millones de
dólares de Obama son menos de la mitad de la asistencia que EEUU envío
en 2008, después de la primera crisis humanitaria de fabricación
estadounidense.
De este modo, decenas de millones de personas
continuarán muriendo de hambre, y por los ataques de los drones y las Fuerzas Especiales de EEUU, en su guerra contra Shabab.
Seis
millones de personas han muerto en Congo, debido a las guerras de los
agentes de EEUU.
La soberanía y la dignidad de Haití fueron usurpadas
por la fuerza de las armas de EEUU. Colombia ocupa el primer lugar del ranking
en número de personas desplazadas –la mayoría de ellas indígenas y
afrocolombianas– como resultado de la colonización del país por EEUU.
Las “otras guerras” de EEUU son, de hecho, más destructivas para la vida
humana que los conflictos reconocidos de Afganistán, Pakistán e Irak.
Ya que Obama declara que no está en guerra con Libia, tal vez también se
la podría calificar como una de las “otras guerras.”
El Día de Acción de la Coalición Black is Back
del 20 de agosto se celebrará en ciudades de todo EEUU y en el
extranjero.
En Nueva York tendrá lugar una jornada educativa en la
iglesia de Santa María, en Harlem. Infórmate y toma conciencia de las
muchas y simultáneas guerras de EEUU contra la humanidad: las “otras
guerras.”