El embajador de Estados Unidos en Nicaragua, Robert Callahan, admitió las críticas nicaragüenses en el sentido de que su país se ha "metido" (en realidad, intervenido activamente) en la política de Nicaragua, pero aseguró que ya no lo hacen ni lo harán más, en una entrevista en la que además opinó acerca de las próximas elecciones nicaragüenses.
En la entrevista, concedida al semanario opositor Confidencial, Callahan dijo, consultado sobre las denuncias del Presidente nicaragüense de que Estados Unidos interviene en los asuntos internos del país, que su país lo hizo durante más de un siglo pero aseguró que ya no lo hacen ni lo harán.
"Todo el mundo sabe que sí, por más de un siglo nosotros nos hemos metido con frecuencia en los asuntos internos de Nicaragua ¿y qué ha sido el resultado? No ha sido muy positivo, obviamente", dijo a la vez que abogó por que "los nicaragüenses mismos decidan su futuro".
Callahan, que el 19 de julio concluirá su misión de tres años en Managua, se refirió también a las relaciones entre Nicaragua y Estados Unidos, señalando que están "bastante bien" en cuanto a la comunicación que existe con varios ministerios de Estado, las fuerzas armadas y la policía.
En la entrevista, divulgada este lunes, Callahan dijo no entender por qué el gobierno de Daniel Ortega no ha autorizado la presencia de observadores nacionales y extranjeros cuando eso daría al pueblo "fe y confianza en los resultados" de la elección presidencial.
Además, Callahan criticó al Consejo Supremo Electoral de Nicaragua, que anunció que después del 16 de agosto dará a conocer un reglamento de observación y posteriormente invitará a misiones locales y extranjeras. Según el diplomático, que asegura que no interviene en asuntos internos de Nicaragua, será muy tarde para garantizar una adecuada supervisión.
"Ya estamos muy tarde, francamente, aquí en Nicaragua para tener una observación del proceso. Obviamente para el día de la votación es una cosa, puede llegar con una semana de anticipación, pero para el proceso, la actualización de los padrones electorales, el proceso de cedulación, eso está ocurriendo hoy día", comentó.
El embajador de EEUU en Nicaragua tiene una larga historia de conflictos con periodistas de medios no afines a los discursos habituales de gobierno.
Por ejemplo, el pasado mes de abril perdió los estribos ante las preguntas del periodista de Multinoticias, Canal 4, Giovanni Loásiga, quien lo cuestionó sobre los crímenes que su país comete en Libia, en donde los bombardeos yanquis y europeos han arrebatado la vida de una gran cantidad de civiles.
"¡Estoy harto de eso! Es solamente una provocación, usted no es periodista", sentenció en esa ocasión el embajador.
Callahan dejará su cargo en Managua el 19 de julio, fecha en que fue derrocada la genocida dictadura somocista que su país instauró, financió y apoyó durante 45 años.
En la entrevista, concedida al semanario opositor Confidencial, Callahan dijo, consultado sobre las denuncias del Presidente nicaragüense de que Estados Unidos interviene en los asuntos internos del país, que su país lo hizo durante más de un siglo pero aseguró que ya no lo hacen ni lo harán.
"Todo el mundo sabe que sí, por más de un siglo nosotros nos hemos metido con frecuencia en los asuntos internos de Nicaragua ¿y qué ha sido el resultado? No ha sido muy positivo, obviamente", dijo a la vez que abogó por que "los nicaragüenses mismos decidan su futuro".
Callahan, que el 19 de julio concluirá su misión de tres años en Managua, se refirió también a las relaciones entre Nicaragua y Estados Unidos, señalando que están "bastante bien" en cuanto a la comunicación que existe con varios ministerios de Estado, las fuerzas armadas y la policía.
En la entrevista, divulgada este lunes, Callahan dijo no entender por qué el gobierno de Daniel Ortega no ha autorizado la presencia de observadores nacionales y extranjeros cuando eso daría al pueblo "fe y confianza en los resultados" de la elección presidencial.
Además, Callahan criticó al Consejo Supremo Electoral de Nicaragua, que anunció que después del 16 de agosto dará a conocer un reglamento de observación y posteriormente invitará a misiones locales y extranjeras. Según el diplomático, que asegura que no interviene en asuntos internos de Nicaragua, será muy tarde para garantizar una adecuada supervisión.
"Ya estamos muy tarde, francamente, aquí en Nicaragua para tener una observación del proceso. Obviamente para el día de la votación es una cosa, puede llegar con una semana de anticipación, pero para el proceso, la actualización de los padrones electorales, el proceso de cedulación, eso está ocurriendo hoy día", comentó.
El embajador de EEUU en Nicaragua tiene una larga historia de conflictos con periodistas de medios no afines a los discursos habituales de gobierno.
Por ejemplo, el pasado mes de abril perdió los estribos ante las preguntas del periodista de Multinoticias, Canal 4, Giovanni Loásiga, quien lo cuestionó sobre los crímenes que su país comete en Libia, en donde los bombardeos yanquis y europeos han arrebatado la vida de una gran cantidad de civiles.
"¡Estoy harto de eso! Es solamente una provocación, usted no es periodista", sentenció en esa ocasión el embajador.
Callahan dejará su cargo en Managua el 19 de julio, fecha en que fue derrocada la genocida dictadura somocista que su país instauró, financió y apoyó durante 45 años.