El vicepresidente de Guatemala, Rafael Espada, admitió que será difícil encontrar información oficial y testimonios sobre los experimentos practicados por médicos estadounidenses a pacientes guatemaltecos en los años 1940.
Ambos países, con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, crearon una comisión que busca esclarecer los hechos.
Su preocupación radica en que se trata de enfermedades que son tabú para la sociedad guatemalteca y los pacientes quizá no querrán colaborar con la investigación y no se interesarán en contar su historia, además se estima que la edad promedio es de 80 años.
"La mayoría quizá ya habrá muerto o no compartieron los detalles y los descendientes quizá no lo recuerden, y el tema es un tabú", afirmó el vicemandatario a periodistas.
El vicepresidente dijo que la comisión encargada de investigar en el país ya está en funciones y está buscando actas en el Ministerio de Salud, publicaciones de prensa y archivos en el Ministerio de la Defensa.
Médicos de Estados Unidos realizaron experimentos médicos a través de infectar de forma intencional con enfermedades veneras a mil 500 guatemaltecos en la década del 40 del siglo pasado.
El mandatario estadounidense, Barak Obama, se comunicó telefónicamente con el presidente de Guatemala Alvaro Colom para ofrecerle sus disculpas por este caso, según fuentes de la presidencia.