Nadie sabe, por ahora, si Benyamin Netanyahu acaba de inventar un fake news o si ha revelado una capacidad del Mossad. En todo caso, su afirmación es escalofriante. Según él, Israel puede hacer estallar cualquier teléfono celular, en cualquier país del mundo, como lo hizo con los buscapersonas del Hezbollah.
A mediados de septiembre, durante un encuentro en Jerusalén con legisladores de Estados Unidos, el primer ministro Netanyahu les inquirió: «¿Tienen teléfonos móviles? (…) Están sosteniendo un pedazo de Israel ahí mismo. Me refiero a que muchos de los teléfonos móviles, medicamentos, comida, ¿saben dónde se producen? (…) Somos bastante buenos produciendo armas, así como espionaje. Compartimos ambas cosas con Estados Unidos, una buena parte de su espionaje» [1].
Sobre las «medicinas» baste rememorar la santa alianza durante el covid con su correligionario Alberto Bourla, jerarca de Pfizer (BlackRock es su principal accionaria) quien proveyó la «vacuna sionista» [2]. Le faltó agregar su obsesión por el control global del agua mediante la empresa estatal israelí Mekorot, muy bien posicionada en México [3].
La bravata de Netanyahu fue interpretada como la militarización (weaponization) de teléfonos celulares, medicinas (¡mega-sic!) y alimentos: la disuasiva capacidad de sabotaje global de Israel con su red de espionaje Pegasus/Candiru [4].
Un mes más tarde, Zhu Xiaoji exigió «frenar la conexión de la tecnología al carruaje de los juegos geopolíticos» [5], en alusión a la apocalíptica intimidación de Netanyahu.
Según Zhu Xiaoji, la «intención de Israel es exhibir sus logros tecnológicos y asentar que los teléfonos celulares en el mundo (¡megasic!) dependen de la tecnología israelí» cuando la angustia planetaria se debe a la «militarización de los dispositivos de comunicación de Estados Unidos y otros países occidentales» con el fin de «preservar su hegemonía digital».
Mes y medio después de la bravata cibernética de Netanyahu, el ex director del Mossad, Yossi Cohen se jactó de que Israel ha desplegado una red de espionaje y sabotaje global (¡megasic!) que usa equipos manipulados con trampas explosivas y espionaje: se trata de «un sistema de gran alcance de hardware comercial (sic) comprometido que se utiliza para recopilar información o, en algunos casos, causar daños físicos.» [6]
Al respecto, el ex director de la CIA Leon Panetta comentó que «la capacidad de colocar explosivos en dispositivos tecnológicos de uso común y convertirlos en herramientas de una guerra terrorista es realmente alarmante. Se trata de una nueva forma de guerra» [7]: Una «sofisticada barbarie» [8].
Según Yossi Cohen, la técnica (sic) está incrustada en «todos los países que puedas imaginar».
Pregunta tonta: ¿estará en México? Yossi Cohen agregó que la técnica se originó con la conversión en armas de los equipos de comunicaciones utilizados por los combatientes de Hezbolá, concretamente buscapersonas (beepers) modificados para funcionar como herramientas de vigilancia remota o dispositivos explosivos: «Si los adversarios están comprando equipos, Israel debe intervenir infiltrándose en su cadena de suministro y explotándola.»
Yossi Cohen confesó que «el concepto fue refinado y escalado globalmente después de haber sido experimentado profundamente durante la Segunda Guerra del Líbano de 2006».
Ya para la guerra de 2024, Israel decapitó a toda la cúpula de Hezbolá. Nada de que asombrarse del Mossad cuyo lema, inspirado en Proverbios 24:6, es: «Mediante el engaño participarás en la guerra», lo cual explayó el ex espía (“katsa”) del Mossad, Victor Ostrovsky, en su libro Mediante el engaño.
Una de las primeras tácticas de su desinformación (técnica Hasbará) enmarca la narrativa desde el inicio con la «posesión de la primera palabra»: adelantarse a los hechos mediante engaño y fake news [9].
Dejo de lado la maligna operatividad de Israel, país genocida y paria, con sus empresas lucrativas de venta de armas –Israel Weapon Industry (IWI)/SK Group, Elbit Systems e Israel Aerospace Industries– ¡Todo un tema!
¿Cómo responderán los BRICS? [10]. Por lo pronto, Rusia, China y Brasil ya prohibieron los celulares instalados con «spyware imposible de eliminar».
Fuente
El diario en español más grande del mundo.
[1] “Netanyahu says ’Everyone with a mobile phone holds a piece of Israel’”, MSN, 16 de septiembre de 2025.
[2] «“Triunfo geopolítico” y “científico” de vacuna rusa: WSJ y la prestigiosa revista médica The Lancet», Alfredo Jalife-Rahme, La Jornada, 3 de febrero de 2021.
[3] «La fétida ley Korenfeld: la corrupta privatización del agua en México», Alfredo Jalife-Rahme, La Jornada, 12 de abril de 2015.
[4] «Candiru, mucho más maligno que Pegasus //Netanyahu y Jared Kushner, en la picota», Alfredo Jalife-Rahme, La Jornada, 21 de julio de 2021.
[5] “Stop tying technology to the chariot of geopolitical games”, Zhu Xiaoji, Global Times, 15 de octubre de 2025.
[6] “Ex-Mossad chief, behind ICJ blackmail campaign, brags Israel has installed a global sabotage network”, Middle East Monitor, 30 de octubre de 2025.
[7] “Ex-CIA director: Pager bombings in Lebanon a form of terrorism”, Middle East Monitor, 24 de septiembre de 2024.
[8] “Lebanon: Israel’s synchronised mass terror attack”, Middle East Monitor, 27 de septiembre de 2024.
[9] «¿VERDAD O FAKE: Atentado De Irán Vs.Israel En México? ¡No Importa! “Alea Jacta Est"», Alfredo Jalife, YouTube, 14 de noviembre de 2025.
https://www.voltairenet.org/article223192.html?fbclid=IwY2xjawOLWuZleHRuA2FlbQIxMABicmlkETFHaW9YNmRPREZKaEhadFhac3J0YwZhcHBfaWQQMjIyMDM5MTc4ODIwMDg5MgABHmVK9yuhmcqjCnTZVwSS_60vabDBgL6Bd0veGHsubZEJUmEz6y_-tGBtY4Sb_aem_QPu5rPnmfAOf6ryRQ7_CKQ

