**La huelga de trabajadores del gigante aeroespacial estadounidense Boeing llegó a su fin luego de que los obreros aceptaran el nuevo acuerdo y la empresa empezara a despedir a los primeros centenares de empleados.
No obstante, el problema no queda solucionado, ya que esos despidos afectarían a la economía de la región, según la prensa local.
De acuerdo con los medios locales, los primeros 438 trabajadores de un total previsto de 17.000 permanecerán en nómina hasta las vacaciones de invierno y serán cesados en enero, pero durante tres meses recibirán prestaciones sanitarias.
Entre los profesionales que serán despedidos se encuentran científicos, ingenieros, analistas, planificadores y técnicos.
"La mayoría de los empleados afectados de EEUU [en estado de Washington] recibirán una notificación a mediados de noviembre y dejarán la empresa el 17 de enero", procede del comunicado oficial de la compañía.
Aún no está claro qué proporción de los despidos corresponde a las divisiones de aviación civil y espacial de Boeing y qué proporción al sector militar, que fabrica desde helicópteros y bombarderos estratégicos hasta drones, sistemas de defensa antiaérea y antimisiles, misiles y bombas lanzadas desde el aire.
Sin embargo, la economista jefe del Departamento de Seguridad Económica del estado de Washington, Anneliese Vance-Sherman, expresó su preocupación por que los despidos pudieran tener repercusiones en todo el estado, teniendo en cuenta que una gran parte de la actividad manufacturera de la empresa tiene lugar en sus vastos centros industriales de Everett y Renton, a las afueras de Seattle.
En sus palabras, "se sabe que hay otros fabricantes aeroespaciales y otros talleres mecánicos que están conectados con Boeing".
"Cuando vemos que se despide a trabajadores o existe inseguridad [en cuanto al despido], esto tiende a extenderse por la economía local y se manifiesta con efectos como la reducción de la demanda de restaurantes, por ejemplo", precisó.
Unos 33.000 maquinistas del sindicato del asediado gigante aeroespacial y de defensa Boeing iniciaron una huelga en septiembre, en demanda de mejores condiciones laborales, salarios más altos y pensiones.
A mediados de noviembre, los participantes en la huelga aceptaron un convenio que prometía una subida salarial del 38% en cuatro años, incluidas primas por rendimiento, y una prima única por la ratificación del dicho acuerdo.
Sin embargo, su reivindicación de mejores pensiones no se ha materializado y tampoco está claro si la demanda de una mayor implicación en la seguridad de los productos se ha abordado en el nuevo contrato.
La paralización de la producción de los aviones Boeing de las series 737 Max, 767 y 777, que ha durado dos meses, ha supuesto un golpe adicional a los beneficios del gigante aeroespacial en medio de las investigaciones de las autoridades sobre las normas de producción y la seguridad de los productos, a raíz de un incidente ocurrido en enero en el que un panel de la puerta de un avión 737 Max 9 de Alaska Airlines salió volando durante el trayecto.
Asimismo, en julio, Boeing acordó pagar 243,6 millones de dólares para resolver cargos de fraude criminal en relación con accidentes fatales de sus aviones de la serie 737 Max 8 en Indonesia y Etiopía en 2018 y 2019 que causaron muerta a 346 personas.
Por otro lado, la desintegración en el espacio del satélite Intelsat-33e de Boeing en octubre, y la saga de la problemática nave espacial Starliner de la misma compañía, que se enfrentó a la avería de cinco de sus 28 propulsores de maniobra, y sufrió cinco fugas de helio separadas, se sumaron a las preocupaciones sobre la reputación de la empresa.
https://noticiaslatam.lat/20241118/despidos-masivos-de-empleados-en-boeing-podrian-extenderse-por-la-economia-local-1159107641.html