Las fuerzas yemeníes y los combatientes del movimiento popular Ansarolá arrebataron el viernes a las fuerzas leales al gobierno dimitido del expresidente fugitivo yemení, Abdrabu Mansur Hadi, el control de la base militar de Al-Mas, cerca de la ciudad homónima de la provincia central de Marib, según reportaron medios locales.
De acuerdo con la información, las fuerzas yemeníes consiguieron cortar las líneas de abastecimiento al este de la base, donde los mercenarios guardan armas avanzadas.
Ese nuevo logro allanaría el camino para que las tropas yemeníes puedan avanzar hacia la ciudad de Marib, tras meses de combates que se han intensificado desde el pasado mes de agosto con el avance rápido de las fuerzas yemeníes.
De hecho, la mayoría de las localidades de Marib ya se ha liberado de manos de los mercenarios pagados por Arabia Saudí y sus aliados, conforme anunció en su día el gobernador de dicha provincia.
Días antes, las fuerzas yemeníes lograron consolidar su control sobre el campamento estratégico de Al-Mas, que se considera la última y más importante línea defensiva de los aliados de Riad en Marib.
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