El secretario de Estado de EE.UU. subraya que el Pentágono ha desplegado fuerzas en La India para asegurarse una posición adecuada ante el Ejército chino.
“Nos aseguraremos de que estamos en una postura adecuada para contrarrestar al Ejército Popular de Liberación (EPL) de China. Creemos que es el desafío de nuestro tiempo, y nos aseguraremos de contar con recursos para hacerlo”, afirmó el jueves Mike Pompeo en una reunión virtual del Foro de Bruselas del German Marshall Fund.
De acuerdo con el jefe de la Diplomacia estadounidense, la confrontación “mortal” del EPL con La India es una de las razones por las que Washington recalibró sus compromisos de defensa en Europa con miras a neutralizar las amenazas emergentes de otras zonas.
Al explicar la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de recortar el número de tropas estadounidenses en Alemania, Pompeo indicó que Washington analizó cómo deberían asignarse los recursos militares y de inteligencia en todo el mundo.
“Esto va a dictar que en ciertos lugares habrá menos recursos estadounidenses. Habrá otros lugares”, explicó Pompeo y agregó que, ante la “amenaza del Partido Comunista Chino (PCCh) a La India, nos aseguraremos de que se nos coloque de manera adecuada para contrarrestar al EPL”.
El secretario de Estado estadounidense también criticó al Ejército chino por “escalar” la tensión fronteriza con La India, militarizar el estratégico mar del Sur de China y describió al gobernante Partido Comunista de China como un “actor deshonesto”.
Todo eso se produce después de que la tensión fronteriza sin precedentes entre La India y China llegara al máximo, tras la muerte de 20 soldados indios este mes de junio.
Tras mortíferos enfrentamientos con soldados chinos, el primer ministro de La India, Narendra Modi, recientemente ha otorgado a su Ejército “total libertad” para adoptar medidas correctivas contra China en la frontera.
Pekín pidió resolver las tensiones fronterizas con La India en el Himalaya “a través del diálogo y la consulta y hacer esfuerzos para aliviar la situación y salvaguardar la paz y la tranquilidad en la zona fronteriza”.
Estas dos potencias nucleares mantienen disputas abiertas sobre territorios en la zona del Himalaya. En 1962 libraron una guerra fronteriza de 30 días, en la que murieron más de 10 000 personas.