El 1 de abril de 1970, el panadero Salvador Cayetano Carpio, junto a 7 personas más, en su mayoría miembros del Partido Comunista de El Salvador (PCS), hicieron champa aparte y aquel pequeño núcleo de hombres fue la semilla de lo que se convirtió en las Fuerzas Populares de Liberación (FPL) "Farabundo Martí"; un fenómeno sin precedente en Latinoamérica de organización político-militar, en combinación con movimiento organizado de las masas y el frente del exterior; haciendo caso omiso a las adversidades territoriales por lo escaso de las zonas montañosas.
"Nuestras montañas serán el pueblo", decía Carpio, quien se convirtió en el legendario Comandante Marcial.
Este grupo inicial fue objeto de humillaciones, de burlas y de acusaciones, pero nada los detuvo: a paso de hormiga los clandestinos revolucionarios se convirtieron en un mar de lucha popular sin parangón. Grandes enseñanzas históricas.
Ley de la vida
El árbol poderoso comienza en la semilla
y aunque el amor sea profundo y alto
es también mínima la semilla del hombre.
El nacimiento del arroyo el polen
el huevecillo de la blanca paloma
la piedra que ha rodado por el monte nevado
desde su pequeñez llegan al mar
al girasol al vuelo interminable
al planeta de nieve que nada detendrá.
En la lucha social también los grandes ríos
nacen de los pequeños ojos de agua
caminan mucho más y crecen
hasta llegar al mar.
En la lucha social también por la semilla
se llega al fruto
al árbol
al infinito bosque que el viento hará cantar.
Roque Dalton
Foto de jjdalton